Una novedosa iniciativa educativa con perros pretende mejorar las habilidades sociales, evitar problemas como el acoso escolar y proporcionar ejemplos de conductas saludables entre los alumnos del instituto de Soutomaior.

La actividad, enmarcada dentro del programa juvenil de intervención social en los centros educativos del municipio de Soutomaior, busca la ayuda de los animales para incidir en la aceptación de las diferencias, la mejora de la autoestima y potenciar la empatía.

Mediante sencillos ejercicios y juegos con los perros, los alumnos trabajan conceptos básicos para las relaciones sociales como la paciencia, el trabajo y dedicación que conlleva todo proceso de aprendizaje o como tolerar la frustración, por ejemplo, para comunicarse con los canes. Dado que los animales no hablan el mismo lenguaje que ellos, los niños necesitan aprender a usar otros medios para entenderse, como el lenguaje corporal.

Con acciones y juegos de este tipo, los profesionales buscan que el niño empatice con el perro y que, a través de ese vínculo, pueda entender cómo se siente. De esta manera, los jóvenes aprenden como ir mejorando sus relaciones, creando actitudes y hábitos que favorecerán sus relaciones interpersonales durante toda su vida.

El alcalde, Agustín Reguera, definió como "muy efectiva y práctica. Apostar por los animales en la educación es un gran acierto, conectan con los niños de una manera muy especial", apuntó.