El titular del Juzgado de lo Contencioso Administrativo Número 1 de Vigo ha desestimado la solicitud de permiso judicial al alcalde de Gondomar, el socialista Francisco Ferreira, para abrir forzosamente la taquilla del policía exedil del PP, Simón Domínguez, al que acusó de quedarse la munición y diverso material policial durante su breve excedencia política. El auto da la razón al agente no solo porque "carece de sentido" , acceder a su armario una vez se ha reincorporado ya a su puesto, sino también porque vulneraría su derecho a la intimidad.

Domínguez ejerce como agente de la Policía gondomareña desde hace 21 años y el pasado 17 de abril solicitó una excedencia para presentarse a las elecciones municipales del 26 de mayo como número 3 de la lista del PP, encabezada por Paula Bouzós. Tan solo dos meses después de la cita con las urnas, que dejó a los populares en la oposición, Domínguez solicitó el 23 de julio su reincorporación al puesto de policía. Dos días más tarde de que anunciase su regreso, el regidor anunciaba públicamente que acudiría la justicia para reclamarle la devolución de las balas, la placa, el casco y las llaves de la taquilla, entre otros materiales.

El agente alegó en contra ante el juzgado y finalmente el magistrado le ha dado la razón. Desestima la solicitud del Ayuntamiento y alude a la prevalencia del derecho a la privacidad del afectado frente a la "desproporción del fin pretendido", además de incidir en que no tiene fundamento la pretensión del regidor dado el regreso al trabajo. Domínguez se incorporó el 25 de septiembre y se encuentra de baja médica desde hace tres semanas.

Ferreira aseguró ayer no tener "ni idea" del auto judicial, pero en cualquier caso restó importancia al asunto porque "esta persoa xa accedeu á taquilla antes da resolución do xuíz". "É un tema resolto. Nós fixemos o que tiñamos que facer que era acudir á xustiza porque este axente non devolvera o material do Concello", recalcó.