El apuñalamiento mortal de un joven de origen marroquí a la salida de un local de copas en Salceda de Caselas el pasado mes de junio, sigue sin esclarecerse. Los investigadores no han conseguido identificar al autor del crimen y la jueza de Instrucción 1 de O Porriño ha archivado provisionalmente la causa contra el único investigado por estos hechos, un joven vecino de la zona conocido como "El Alemán", que fue detenido y pasó diez días en prisión provisional, hasta que quedó en libertad tras considerar el juzgado que había un posible "error" en su identificación.

Familiares y amigos de este joven reivindicaron desde el principio su inocencia y se movilizaron para reclamar su libertad pues ni siquiera estaba en la zona de copas donde tuvo lugar el crimen, aunque un testigo creyó reconocerle. Sin embargo, al menos otros cuatro testigos que se encontraban allí negaron taxativamente que fuera la persona a la que vieron discutir con el joven fallecido y corroboraron la tesis exculpatoria del sospechoso.

Precisamente por eso, la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de O Porriño ha decretado el sobreseimiento provisional del procedimiento respecto a "El Alemán", con la revocación de las comparecencias periódicas que debía realizar en sede judicial. Y es que como medida cautelar la jueza había fijado comparecencias quincenales.

Soufian Mrha, un chico de 24 años vecino de Salceda y natural de Marruecos, falleció tras recibir varias puñaladas en el costado izquierdo a raíz de una discusión que mantuvo con otro joven en un pub de la zona. Pese a los intentos de la Policía Local y de los sanitarios del 061, nada se pudo hacer por salvarle la vida. Poco después era detenido por la Guardia Civil "El Alemán", a quien un testigo aseguró reconocer como el agresor. Tanto el detenido como su familia y amigos lo negaron, ya que el chico estaba en su casa durmiendo, para ir a trabajar muy temprano, según declaró su madre.

"Yo no fui, soy inocente, que salga rápido el culpable", pedía "El Alemán", al ser excarcelado. El caso de este apuñalamiento mortal dio un giro radical cuando varios testigos que vieron al supuesto agresor confirmaron que no era la persona a la que se había detenido. La jueza acordó de oficio su puesta en libertad a la vista de las ampliaciones del atestado, en el que se hacía referencia a la existencia de un "posible error" en la identificación.

El caso sigue abierto y prosigue la investigación para esclarecer quién fue el autor del homicidio. Mientras no se identifica al autor del apuñalamiento mortal, la Fiscalía ha solicitado a la jueza que declare compleja la causa, lo que prolonga los plazos de investigación otros 18 meses.