Cuando alguna persona, pareja o familia visita el refugio de animales Os Biosbardos de Ponteareas para adoptar un perro abandonado, Golfo, Kefrén y Sar nunca son los elegidos. Llevan muchos años en esta instalación de A Piracaraña en la que actualmente conviven 80 canes. Ellos padecen leishmaniosis, comúnmente conocida como la enfermedad del mosquito, porque la causa un parásito que se contagia a través de la picadura de un grupo de mosquitos.
Aunque los responsables del refugio ofrecen a los interesados la "adopción definitiva", que incluye los gastos pagados de su alimentación y medicación a cambio de conseguir que estos perros enfermos tengan un hogar; ellos nunca son los elegidos. "Les explicamos que con medicación 6 meses, una pastilla cada 12 horas y con un control, estos perros no tienen síntomas, pero nadie se los acaba llevando", explica Leticia Pérez, secretaria de la protectora de animales Os Biosbardos, gestionada gracias al trabajo altruista de 60 voluntarios que se reparten tareas como alimentar a los perros, limpiar el refugio, sacarlos a pasear, vender productos de segunda mano o merchandising para conseguir financiación o la recogida de nuevos animales abandonados.
No solo los perros enfermos son rechazados por los hogares adoptantes, tampoco los de más de 8 años o los de gran tamaño encuentran familia y tienen que vivir invierno tras invierno, con mucho frío y goteras, en el refugio. "Los fines de semana aprovechamos para realizar pequeñas obras, pero tapamos unas goteras y aparecen otras, el refugio se queda pequeño y está muy deteriorado, la solución sería que alguien donase un terreno para construir uno nuevo" explican desde la protectora.
Os Biosbardos tiene un gasto mensual de 8.000 euros, entre veterinarios y alimentación de perros y de gatos. Y es que además de los perros abandonados se encarga de las colonias felinas. "Son también voluntarios los que los alimentan por las noches, llueva o haga frío, y de coger a las femias para esterilizarlas", dicen los voluntarios que además insisten en la gran dificultad que supone encontrarle hogar a los gatos. "No tenemos refugio para gatos y por eso, una vez que son atendidos en el veterinario,porque han perdido un ojo, o una pata, nos urge encontrales un hogar", detallan.
Os Biosbardos está a cargo ahora mismo de 448 animales, entre perros y gatos. Muchos de ellos acogidos por voluntarios. Solo en este año han recogido 212 nuevos perros y perras abandonados y 146 gatos y gatas de la calle.
"Siempre estamos al límite" aseguran, porque reciben aportaciones de socios y de quienes amadrinan o apadrinan algún animal, pero "los abandonos no cesan, las cifras de recogida no descienden año a año" aseguran. "Damos charlas para insistir en una adopción responsable, porque un animal no debe ser un capricho de Navidad y la importancia de esterilizar si no se quieren cachorros pero los abandonos continúan" apunta Pérez.
Precisamente para conseguir pienso para los animales, los voluntarios harán hoy una recogida solidaria en el hipermercado de Angoares.
