El Aula de Integración del Concello de Mos cumple una década y suma 180 usuarios. Se trata de "un espacio para que los expulsados del instituto encuentren un entorno adecuado para recapacitar y preparar su correcta reinserción en la comunidad escolar tras el período de sanción o expulsión", señala la concejal de Educación, Julia Loureiro.
En el momento en que el alumno es expulsado, desde la Dirección del centro se le comunica a los padres/tutores del menor la existencia de esta aula como medida de apoyo y son ellos los que deciden si quieren que su hijo acuda o no, con el objetivo de promover un cambio de conducta, así como su continuidad en el estudio y trabajo diario, evitando que rompa con la rutina escolar durante el período de expulsión, de ahí que durante ese tiempo el alumno realice igualmente las tareas correspondientes para cada una de las materias que está cursando e incluso los exámenes.
La continuidad a lo largo de los años viene avalada por los buenos resultados y es que, a pesar de registrarse un repunte de expulsados en los dos últimos cursos, la cifra ha ido en descenso. Un número que no va en paralelo al de usuarios del aula porque no solo se atiende y ofrece un servicio de asistencia al alumno expulsado, sino que "se trabaja también en materia de prevención de posibles expulsiones, dirigiéndose a aquellos estudiantes que por su comportamiento cuentan con amonestaciones o partes de incidencia, evitando que vaya a más".
El objetivo final es promover la mejora de la convivencia escolar, incluso intentar mediar antes de la expulsión, "considerando así necesario que existan reuniones de mediaciones entre el alumnado y el docente implicado que retrasen o eviten la expulsión como castigo", puntualiza.
Con todo, desde el Concello, que volverán este curso a prestar este servicio complementario al alumnado del IES de Mos, recuerdan que el buen resultado del Aula de Integración depende mucho de la implicación de las familias. "De nada sirve que el alumno acuda al Aula de Integración si luego en casa no se muestra interés por lo que allí pasa; de los padres también depende la evolución y el cambio en la conducta de sus hijos".
