Cientos de aficionados al remo se dieron cita ayer en Chapela en la celebración del Día del Remo, organizado por el club local y que combinó actividades deportivas y gastronómicas.

A pesar de que el mal tiempo empañó la primera parte de la jornada, se realizaron varias regatas con la participación excepcional de la patrullera "Tabarca", a la que acompañaron remeros de todas las edades, incluidos deportistas llegados de Francia y el País Vasco.

Traineras, kayaks y canoas se sumaron a la ruta que les llevó hasta el puente de Rande, donde una ofrenda floral rindió homenaje a los marineros caídos en la Batalla de Rande. Como recordaba ayer uno de los organizadores, Juan Balbín, el histórico combate naval de 1702 "tuvo como un escenario principal Chapela, pues era el punto por el que las tropas entraban hacia la fortaleza de Rande, y aquellos héroes lo hacían remando".

Los participantes en la travesía marítima disfrutaron al mediodía de una paella en el paseo de Cardona y por la noche, de un espectacular asado en el que se cocinaron terneras "al espeto". Además de la carne se degustaron mejillones, cultivados en las bateas de la ría.

El Club de Remo de Chapela organizó además regatas en las que compitieron jóvenes y veteranos, en tripulaciones mixtas. La fiesta de los remeros se prolongó hasta la madrugada con música y baile en las instalaciones del club.