José Manuel Fernández Pérez, dueño del desguace en el que apareció el coche de "El Chicle", asegura que el Concello de Mondariz si que estaba al tanto de que "en la finca existe un depósito de vehículos descontaminados".

El empresario explica que en 2015 solicitó la licencia de actividad de forma escrita, cuando el alcalde en ese momento era Carlos Montes Bugarín "Calis", actual portavoz de AporM. "Fue el propio Calis quien me dijo que no iba a tener problema, pero que modificase el proyecto para conceder la licencia a través del Plan Xeral de Ordenación Municipal que estaba pendiente de aprobarse y no por las normas vigentes del año 1998 como nosotros lo habíamos planteado", expone Fernández Pérez. Durante estos cuatro años, el propietario asegura que ha reclamado en diversas ocasiones a "Calis" la licencia "pero su respuesta siempre ha sido que dependía de la Xunta por la aparición de unos restos arqueológicos".

El dueño del desguace asegura "estar convencido de que todo esto ha sido una trampa orquestada desde el primer día, en primer lugar por el Sr. "Calis" por hacernos cambiar un proyecto para basarlo en unas normas urbanísticas que tardarían en aprobarse y una encerrona ahora aprovechada por el nuevo presidente de la Entidad Local Menor de Vilasobroso para colgarse medallas políticas", lamenta el empresario mondaricense.

Además, Fernández Pérez asegura que "los coches almacenados de los que se habla sólo llevan allí unas semanas, concretamente desde el 5 de agosto, debido al parón del mes por vacaciones de la empresa que los adquiere". Por lo que "no entiendo por qué el presidente de la Entidad Local Menor alerta a la Policía Autonómica de un riesgo que no existe, todos los coches que se depositan allí están descontaminados", recalca.