El líder de Vox, Santiago Abascal, de vacaciones con su mujer, la "influencer" Lidia Bedman, y sus hijos en Galicia -estuvo en Sanxenxo la semana pasada- desde hace unos días, se acercó ayer junto a unos amigos a visitar Baiona, donde además de tomar un aperitivo en una céntrica terraza, fue requerido para numerosos selfis por algunos vecinos y turistas con los que se topó en su paseo por el casco histórico de la real villa.

Más tarde fue visto a la salida de un restaurante situado en el entorno del monasterio de Santa María de Oia. Según algunos testigos, un vehículo con cristales tintados se acercó a recogerle hasta la puerta del establecimiento, lo que despertó la curiosidad de las numerosas personas que se encontraban en las inmediaciones disfrutando de la puesta de sol.

Inevitablemente, Abascal fue reconocido. Una mujer empezó entonces a increparle a gritos y muchos de los allí congregados secundaron su rechazo hacia el líder de Vox, que abandonó el lugar entre abucheos.

No es la primera vez que Abascal se deja ver durante su estancia en Galicia, ya que el domingo se le pudo ver junto a su mujer y sus hijos en el paseo de Silgar de Sanxenxo.

De su periplo vacacional, dan buena cuenta las imágenes que tanto Abascal como su mujer, Lidia Bedman, publican en Instagram. En una de ellas puede verse al líder de Vox con sus cuatro hijos de espaldas en una playa frente a lo que se intuye como el cabo de Fisterra.