A Guarda estrena estos días la nueva imagen de la calle Concepción Arenal tras meses de obras y una inversión, cofinanciada entre la Diputación y el Concello, que superó el millón de euros. Anteriormente este vial soportaba una alta presión de tráfico rodado, pero, a partir de ahora, se convertirá en un espacio donde el tráfico rodado estará restringido y los peatones tendrán prioridad.

"Esta calle supone el pistoletazo de salida de un nuevo modelo de movilidad en A Guarda, que recuperará el espacio público en el centro de la villa para las personas", indican desde el Concello, haciendo hincapié el concejal de Movilidad y Modelo Urbano, Anxo Baz, en la necesidad de transformar el centro urbano en "un espacio integrador, accesible y dinámico". Para alcanzar este objetivo, Baz señala la Plaza de Abastos, la cual adelanta que necesita una reforma "que trataremos de abordar en esta legislatura".

Desde la concejalía de Movilidad están convencidos de que, a pesar de que la ejecución de las obras creó mucha controversia entre los comerciantes, que vieron menguada su actividad, el resultado será positivo para el comercio y la hostelería. "Queremos que este cambio suponga un impulso del comercio y que los vecinos y vecinas de A Guarda puedan disfrutar del centro, pasear, comprar, tomar algo y, por supuesto, acoger a las personas que cada año nos visitan".