La decisión del PSdeG-PSOE de mantener el veto a una alcaldesa de Movemento Salceda rompió ayer las negociaciones entre ambos partidos, lo que acerca al PP con un hombre al frente, Santiago Rodríguez Davila, al gobierno de la localidad.

Movemento Salceda emitió anoche un comunicado en el que asegura que PSOE y MS han roto las negociaciones después de la tercera reunión "convocada, ao igual que as anteriores, por parte de MS para perfilar un posible pacto de goberno"

Según MS, la comisión negociadora del PSOE mantuvo la posición de votar a Verónica Tourón para el puesto de Alcaldesa, avalados por la decisión de la Asamblea de la Agrupación Socialista de Salceda, que al parecer votó hasta en tres ocasiones postularse.

Además, Verónica Tourón trasladó a MS que la postura socialista estaría avalado por la Ejecutiva Provincial socialista, según destacaron las mismas fuentes

Según la nota de MS, la decisión inamovible por parte del PSOE "imposibilitó incluso el debate del proyecto de gobierno y del posible pacto a pesar de tener sobre la mesa documentos para ello aportados por ambas formaciones".

La comisión de Movemento Salceda se mostró sorprendida por la posición cerrada del PSOE, "que cambió de postura después haber afirmado en una entrevista radiofónica de la propia Verónica Tourón que la alcaldía no era lo más importante, "sino que lo era el proyecto de gobierno y de futuro".

El PP con 6 concejales es primera fuerza, Movemento Salceda con 4 es la segunda y el PSOE con tres ediles, tercera. Movemento entendió durante toda la negociación que al ser la lista más votada de la izquierda les correspondía la alcaldía, tal y como se viene haciendo en los pactos establecidos hasta ahora, pero, los socialistas exigieron este puesto.

El PP de Salceda, que consiguió ser la lista más votada en estas elecciones, viene reclamando desde el 26 de mayo que se les permita gobernar. Fuentes populares daban por hecho, ya ayer por la mañana, que si Movemento Salceda no cedía, ellos tenían opciones reales de gobernar ya que los socialistas habían tomado la decisión firme de votar a su candidata.