Diego San José fue un escritor y periodista al que la Guerra Civil truncó su brillante carrera. Poeta, dramaturgo y novelista que llegó a publicar obras muy populares en los años 20, ocupó el cargo de jefe de prensa bajo el Gobierno de la II República. Por eso fue condenado a muerte. Estuvo preso cinco años y acabó en la isla de San Simón. Sus contactos familiares le permitieron eludir el pelotón de fusilamiento e incluso reintegrarse socialmente con su familia en Redondela.

En noviembre del año pasado, a iniciativa de dieciséis colectivos de la villa, Diego San José (Madrid 1884-Redondela 1962) fue reconocido como Fillo Adoptivo. Un título honorífico que este viernes van a recibir sus familiares -parte de ellos residentes aquí- en un acto en el Multiusos de A Xunqueira. Uno de sus nietos -con el que comparte nombre- agradecía ayer que así, en la figura de Diego San José "se reconozca una trayectoria truncada injustamente", y ahora reparada.

El acto será a las 19.00 horas y contará con la presencia de Manuel Puga Pereira, presidente del patronato de la Fundación Penzol, quien hablará sobre la relación de San José con Redondela. A continuación, intervendrá el escritor y crítico Juan Manuel de Prada, quien abordará la faceta literaria del autor homenajeado, al que menciona en obras como "Las Máscaras del Héroe" o "Nuevas visiones del Quijote" . También habrá música. Alejo Amoedo interpretará al piano piezas de Reveriano Soutullo -y es que el compositor fue cuñado de San José- y cantarán las corales Voces Graves y O Piñeiral de Chapela.

El nieto del escritor reconoce su satisfacción por el reconocimiento. "La familia ha estado muy vinculada a Redondela desde que mi abuelo llegó. Aunque pasó malos años fruto de la prisión y la posguerra, se integró muy bien y todos fuimos bien acogidos por el pueblo". Diego San José ya conocía Redondela antes de ser trasladado a San Simón como prisionero de guerra. Inicialmente condenado a muerte, la pena le sería conmutada por la cadena perpetua y quedaría en libertad en 1944. Con la ayuda de Soutullo, de Ernestina Otero y del industrial José Regojo, San José pudo traer a su familia e integrarse en la vida laboral y social de Redondela. Entre otras ocupaciones escribió para FARO DE VIGO, primero con seudónimo y luego ya con su firma.

"El que Redondela le acogiese de esa forma dulcificó lo que pudo ser un drama mucho mayor, tuvo suerte de no acabar fusilado", dice su nieto. La dureza de su paso por diferentes penales franquistas quedó plasmado en el libro "De cárcel en cárcel", publicado póstumamente al igual que "Memorias de un gato" (2018) y otras obras aún inéditas. "Nunca dejó de escribir, aunque el régimen no le dejase publicar".