Los vecinos de Chapela entregaron ayer en el registro del Concello de Redondela más de 400 firmas para reclamar una mejora de la seguridad vial en los caminos de Penisal, Subido, Formiga y Ánimas, principales vías de comunicación entre la zona alta y baja de la parroquia, en el barrio de Iglexia.

Los residentes de la zona llevan meses quejándose de la elevada siniestralidad en la zona, sobre todo en el Camiño do Penisal, donde se produjeron numerosos accidentes que atribuyen a la mala adherencia del firme a pesar de que el vial fue asfaltado hace solo tres años. El riesgo de deslizamiento se incrementa de manera exponencial durante los días de lluvia, cuando este estrecho camino y de gran pendiente se transforma en una "auténtica pista de hielo", asegura el presidente del colectivo, Marcial Pérez.

La asociación vecinal ya remitió en los últimos meses cuatro escritos dirigidos a los responsables municipales sobre este asunto, además de varias reclamaciones por parte de los propios afectados directos, en varios casos con la intervención de la Policía Local. El presidente de los vecinos denuncia que, pese a las reclamaciones, los caminos afectados "siguen en las mismas condiciones de peligrosidad que afectan gravemente a la seguridad vial y a la integridad física de los usuarios de estas calles".

Entre las principales deficiencias que denuncian destaca la falta de adherencia del pavimento. En este sentido critican que, ante el desnivel que presentan estos cuatro caminos, no se tuviera en cuenta la aplicación de un asfalto más rugoso. Así, con el continuo paso de vehículos el firme se encuentra muy liso, provocando que muchos coches patinen cuando el pavimento está mojado, una situación que ha causado varios accidentes de circulación y caídas de peatones.

Viales estrechos

La escasa anchura de los viales es otra de las demandas de los residentes de la zona, ya que en muchos tramos de las calles apenas se cruzan dos vehículos. Esto también afecta a la seguridad de los peatones, ya que todos carecen de aceras en las que protegerse de los coches, con el agravante de que se trata de una zona muy transitada por niños ya que es uno de los principales accesos al instituto. También en el entorno se ubican los principales servicios de la parroquia, como el pabellón de deportes, el multiusos, el centro de salud, la iglesia o Correos, entre otros.

Otras quejas son la mala señalización, la falta de recogida de aguas transversales, las canalizaciones obstruidas y la maleza que se acumula en varias parcelas colindantes lo que empeora la visibilidad en varios puntos.