Manuel Carrera y Marcelino Coto, los dos concejales cesados la semana pasada de sus puestos del gobierno por la alcaldesa de Porriño, Eva García de la Torre, descartaron ayer en rueda de prensa cualquier deslealtad con la regidora.

"La deslealtad ha sido de ella", remarcó Carrera, admitiendo "que hace unos dos años, dirigentes del PP y conselleiros de la Xunta me propusieron hacer una moción de censura para dar la alcaldía a Carlos Martínez -entonces portavoz del PP- y dijimos rotundamente que no, que teníamos un compromiso con el que iríamos hasta el final, que fue lo que siempre le dijimos a la alcaldesa".

Los ediles destacaron que la gestión de un total de 4.450.392,44 euros en obras a punto de rematar, otras iniciadas este 2019 y otras en proceso de licitación, a lo que habría que sumar otro tanto de lo realizado desde 2015 junto a las subvenciones tramitadas ya este primer mes del año, "es la razón principal de nuestro cese". También afirmaron que la destitución se hizo "en el marco de una de esas arroutadas a las que nos tenía acostumbrados", puntualizaba el exedil de Vías y Obras y exteniente de alcalde que enumeró, en rueda de prensa, todos los proyectos realizados y pendientes de ejecutar en esta legislatura "que se los dejé en cartera y por los que se ha dedicado ahora a pasear, vendiendo nuestro trabajo y sacrificio", aseveraba.

Carrera y Coto se mostraron ya no solo en desacuerdo con las justificaciones de la alcaldesa, "totalmente falsas y que se demuestran precisamente ahora en las fotos que se está haciendo por todas las obras que hemos gestionado, grandes y pequeñas", sino por las formas de proceder. Cuando los cesó, Carrera estaba de vacaciones fuera y a Coto se lo comunicó de manera electrónica estando justamente en su despacho del Concello, "sin previo aviso ni ningún tipo de reunión", aunque en este aspecto aseguran que solo se hicieron reuniones de trabajo el primer año de legislatura "luego nunca más nos volvimos a reunir para nada, ni tan siquiera antes de un pleno".

Carrera señaló también "la actuación dictatorial" de enviar un policía local el lunes a su despacho mientras este recogía sus pertenencias, "algo nunca visto en la historia de este Concello y de lo cual el propio agente se mostró avergonzado". Por su parte, Coto indicó sentirse ofendido "soy la quinta generación de una familia de Porriño y no voy a consentir que alguien que no es ni conoce Porriño nos trate como delincuentes; defiendo mi honor, el de mi compañero y el de todos los porriñeses, que no merecen tener al frente una persona que descalifica y miente, y es que lo de mentir es una actitud y una práctica innata de esta persona, que ella misma reconoció ante el pleno y ante un juez".

Ambos confirmaron su continuidad en las filas de UDDL "con el cual optamos a ser la lista más votada, porque las mayorías absolutas se acabaron", puntualizaba Coto remarcando que "el 26 de mayo los ciudadanos dictarán sentencia".

Ante la posibilidad de nuevos pactos tras los comicios, Carrera explicó "que habrá que ver primero el resultado y luego seguramente se abrirá un abanico de posibilidades, ante el cual no cerramos puertas a nadie".