El polígono industrial de Ribadil, en A Cañiza, al que acuden a trabajar a diario cerca de 250 personas, dispone ahora de nuevo asfaltado y viales pintados, además de fibra óptica instalada para que las empresas puedan contratar internet a velocidad más competitiva. No obstante, las industrias siguen reclamando iluminación para que la principal área industrial de A Cañiza esté en condiciones similares a otras. Según aseguran, la zona baja del parque empresarial carece totalmente de alumbrado, lo que obliga a los trabajadores a circular a oscuras por la zona industrial y convierte al polígono en una zona "insegura", dicen.

"En nuestra empresa se empieza a trabajar a las seis de la mañana y cierra a las diez de la noche, por eso los que entran primero y los que salen de últimos, lo hacen sin luz" explican trabajadores de la empresa Reciclados Plásticos La Cañiza, que dispone de iluminación propia. La misma carencia la constatan trabajadores de Saeplast Spain, cuya nave lleva en activo en este polígono desde 2001.

El propio alcalde cañicense, Miguel Domínguez, confirma esta necesidad y asegura que el Concello ya ha solicitado una nueva subvención a la Consellería de Economía para dotar al polígono de Ribadil de iluminación led. No obstante la resolución de esta convocatoria de ayudas todavía tardará para conocer si A Cañiza recibe la financiación solicitada.