El Concello de Tui es uno de los 15 municipios gallegos a los que el Gobierno español les ha enviado una carta diciendo que si no retiran los símbolos franquistas que quedan en sus calles o edificios se arriesgan a perder ayudas públicas, ya que están obligados por la Ley de Memoria Histórica. Sobre esta misiva el alcalde, Carlos Vázquez Padín, ha recordado que todos los elementos del régimen con los que contaba el municipio ya han sido substituidos y que, aunque no especifican en la carta, quizás se refieran a la figura del exministro y líder de la derecha monárquica durante la Segunda República, el tudense Calvo Sotelo.

Calvo Sotelo da nombre a una céntrica calle y tiene su propia estatua en Tui, la cual ha sido el blanco de numerosos actos vandálicos en las últimas décadas, como su decapitación en 2006. Sobre la posible referencia de la epístola a la retirada de la estatua de tres metros dedicada a Calvo Sotelo, el alcalde defiende que "aunque no comparto su ideología, Calvo Sotelo fue una víctima a la que fueron a buscar a su propia casa para asesinarlo" y matiza que la carta "es genérica y nada clara".