Ampliar la base de voluntarios en Redondela es el objetivo de la campaña que ayer protagonizaron integrantes de la Cruz Roja con un punto informativo en la Alameda. Numerosas personas se acercaron a conocer las características del voluntariado y las actividades que desarrolla esta organización humanitaria, después de que el Concello de Redondela le cediese un local en la Casa da Cultura, en el centro de la villa.

Esta nueva sede de Cruz Roja permitirá a la asamblea local y a los voluntarios organizar mejor sus tareas, que hasta ahora se coordinaban desde Vigo y Pontevedra, según los casos.

"Hay unos 100 mayores redondelanos en nuestros programas de acompañamiento y queremos impartir más cursos de formación y charlas en centros educativos", explica la responsable local Diana Freire. Y es que Cruz Roja lleva unos diez años realizando actividades en Redondela, pero "debido a la gran población de la zona y las múltiples demandas, se considera necesario reforzar nuestra intervención abriendo una delegación".

Entre los servicios humanitarios que prestan los voluntarios cabe destacar el seguimiento a personas mayores, en particular aquellas que viven solas, bien a través de dispositivos de teleasistencia -con los que pueden pedir auxilio inmediato-, o con acompañamientos en el hogar, en visitas al centro médico o para hacer gestiones en la villa.

Otras actividades de Cruz Roja con numerosos usuarios redondelanos son los "talleres de memoria" o de gimnasia de mantenimiento enfocados también a la población más longeva.

La juventud es otro sector al que ayudan los voluntarios, mediante clases de refuerzo escolar, orientación laboral o charlas en centros educativos "de prevención de conductas violentas o sobre salud", apunta la responsable local.

La sede que estrena Cruz Roja facilita a la entidad el contacto con la población y dar a los voluntarios la formación que requieren sus tareas. Precisamente un argumento para atraer personas al voluntariado de Cruz Roja es que este"permite ganar experiencia útil para trabajar".

Según comenta Beatriz González, una voluntaria de Pontevedra que ayer informaba en Redondela, "tiene que ser una decisión propia de comprometerse de una forma compatible con la vida propia, por ejemplo una, dos o tres tardes a la semana". El perfil suele ser gente joven o mayores de 55 años con tiempo libre y "ganas de ayudar".

A las personas interesadas en colaborar con Cruz Roja se les entrevista para conocer sus capacidades y disponibilidad. "Reciben una formación básica institucional y se firma un acuerdo de colaboración. Cuentan con un seguro y se les abonan gastos como desplazamientos", apunta Diana Freire.

Cruz Roja ya está en contacto con asociaciones redondelanas con el fin de extender su labor por las parroquias. En su nueva sede están de lunes a viernes de 9 a 14 horas, y de lunes a jueves de 16 a 18 horas.s