La Audiencia Nacional falló, el pasado mes de noviembre, a favor del portavoz de Unión Centrista de Nigrán (UCN), Antonio Fernández Comesaña, sentenciando "un daño moral como consecuencia de haber estado sujeto a una larga investigación en relación a unos hechos considerados especialmente alarmantes e infamantes, inherente a las dilaciones indebidas en el procedimiento penal, con consecuencias de desprestigio social así como una carga patente de angustia y frustración", por lo que el tribunal acordó indemnizarle con una cuantía de 6.300 euros.

Los hechos se remontan a finales del 2009, con la denuncia presentada ante la Fiscalía acusándolo de fraude y tráfico de influencias al firmar seis facturas por importe total de 53.000 euros, algunas de ellas por trabajos no realizados. Los recibos fueron emitidos por la empresa Alvac para cobrar por encargos de proyectos de urbanización, instalaciones e incluso levantamientos topográficos en la calle Manuel González Prado, en la parroquia de San Pedro de A Ramallosa, durante el mandato en el que el edil ostentaba el cargo de concejal de Infraestructuras como miembro del Partido Independiente de Nigrán (PINN), que gobernaba en coalición con el PP.

El Juzgado de lo Penal 1 dictó sentencia a favor de Fernández y, posteriormente, lo ratificó la Audiencia Provincial, en julio del 2015. "Me acusaron de falsificador, de emitir facturas falsas de obras no realizadas e imputado por supuestos delitos de fraude y tráfico de influencias, cuando todo era mentira", declara Fernández Comesaña. Debido a estas acusaciones la Fiscalía llegó a solicitar la inhabilitación para cargo o empleo público durante un período de nueve años.

"He sido víctima de una persecución y linchamiento político-mediático sin precedentes, al judicializar el PSOE la política municipal, con fines electoralistas perversos, para presentarme ante los ciudadanos como un delincuente, a pesar de ser un simple concejal honrado y honesto, cuyo único delito fue el haber formado parte de un gobierno durante escasos tres años, pero -aunque tarde- afortunadamente al fin se hizo justicia", expone el político.

"Fui absuelto, no solo una, sino dos veces, tanto en el Juzgado de lo Penal como en la Audiencia Provincial, a pesar del recurso de la Fiscalía, y que después de dos absoluciones haya conseguido que me indemnicen por los daños morales sufridos, es una perfecta demostración de la barbaridad que tuve que sufrir durante cinco largos años, pero confiado en que finalmente la justicia pondría a cada uno en su sitio, lo que obliga a reflexionar de que en política no vale todo, y así es como se deteriora y, aunque no guardo rencor, todavía sigo esperando disculpas públicamente", concluye Fernández Comesaña.

El edil mostró ayer su especial satisfacción por esta sentencia que dijo es novedosa en Galicia, ya que no se conocen casos de indemnizaciones relacionadas con hechos similares. En la actualidad, Antonio Fernández se mantiene como concejal del Concello de Nigrán.