Medio centenar de trabajadores de ambulancias de toda Galicia realizaron esta mañana un escrache al domicilio del conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, en Baiona. Convocados por la CIG para exigir su intervención en el conflicto laboral abierto tras la ruptura de las negociaciones del convenio colectivo, se concentraron junto al portal a las 11.30 horas. Allí permanecieron con pancartas y consignas durante una hora, hasta que iniciaron una marcha hacia el centro de salud de la localidad, a apenas 300 metros. Antes de abandonar el lugar, algunos de los presentes realizaron pintadas en la pared del edificio, en las que puede leerse: "Almuiña dimisión. Asdo: Ambulancias".
El sindicato nacionalista justifica el ataque a la casa del conselleiro "porque os traballadores ata aquí chegaron", según explicó su delegado del sector del tranporte en el área de Vigo, Carlos Lamosa. El representante sindical asegura que han solicitado reuniones sin éxito al conselleiro para exponer su situación "despois de tres anos sen convenio" y para reclamar más medios materiales y humanos. "Nos últimos anos o traballo aumentou entre un 10 e un 15% pero o número de ambulancias é o mesmo e o número de traballadores tamén". El sindicato denuncia la precariedad en la que se encuentran los trabajadores con "las horas extras sin cobrar o mal pagadas, sin los descansos nin las vacaciones reglamentarias, con material y uniformes deficientes y con sobrecarga de trabajo por falta de personal".
No es la primera vez que Almuiña sufre un escrache en su casa. Ya se vio sometido a otro ataque en 2013 cuando un grupo de afectados por preferentes empapeló su portal con pegatinas reivindicativas.
