La Diputación ya tiene la solución para la curva peligrosa de A Estivada que los vecinos de la parroquia baionesa de Belesar llevan 16 años reclamando para acabar con los accidentes, tres graves en los últimos dos años. El diputado de Mobilidade, Uxío Benítez, y el jefe del servicio, Francisco Alonso, presentaron el proyecto al alcalde de Baiona, Ángel Rodal, y al presidente de la comunidad de montes, Pablo Sánchez Román, en una reciente reunión en Pontevedra.

La propuesta plantea suavizar la curva en forma de "u", que lleva a los camiones y autobuses a invadir el carril contrario para girar, en un tramo de 200 metros frente al centro social de la parroquia, alejando la calzada del edificio y aumentando la cota, como solicitaban los afectados para eliminar el peraltado que genera repetidas salidas de vía. La carretera mantendrá el ancho actual y no será posible dejarla recta del todo, según señaló el jefe de servicio de Mobilidade, "debido á presenza de construcións de Fenosa que resultan economicamente inviables de trasladar".

Trámites burocráticos

Para llevar a cabo la modificación del trazado será necesario ocupar terrenos que la comunidad de montes ya ha acondicionado con un destierre y los técnicos provinciales estudian la fórmula jurídica más ágil. Los comuneros se quedarían con el espacio que ahora ocupa el vial para habilitar un aparcamiento o un espacio de ocio ante su local social. Se baraja que los comuneros cedan el suelo al Concello y este, a su vez, lo ponga a disposición del organismo provincial a través de un convenio y que la Diputación haga lo propio con la carretera para que sea el Ayuntamiento el que otorgue su titularidad a la sociedad mancomunada. Se contempla también una permuta directa entre comuneros y Diputación que, aunque pueda parecer más sencilla, "presenta máis inconvenientes burocráticos", según explica Uxío Benítez.

En cuanto se resuelva el trámite de los terrenos, la Diputación licitará el proyecto para poner en marcha las obras, con las que tanto el representante de los comuneros como el alcalde baionés han mostrado estar de acuerdo después de meses de negociaciones en busca de una alternativa que acabe con la inseguridad vial en la zona.