Las obras de la nueva avenida de Tomiño, proyecto en el que han participado Concello, Diputación y Xunta, avanzan a buen ritmo y por delante del calendario previsto, por lo que, a pesar de que el plazo de ejecución era de doce meses, la nueva avenida podría estar finalizada antes del verano de 2019. Gracias a las buenas condiciones meteorológicas, en los próximos días finalizará la primera fase de las obras, que han consistido en la preparación del terreno y la aportación de piedras y otros materiales para hacer los rellenos que están dejando la base de la vía a una misma altura.

La segunda fase de la obra, según explica el diputado de Mobilidade, Uxío Benítez, ya no será tan visual para los ciudadanos, ya que consistirá en la instalación subterránea de todas las canalizaciones de servicios. Esta parte de los trabajos durará tres meses y servirá para dejar bajo tierra todas las tuberías. La tercera fase comenzará cuando se apliquen las diferentes capas de aglomerado y tratamientos antideslizantes en la calzada, se plante vegetación y se instale el mobiliario urbano y la iluminación.

Por todo esto, Benítez se ha mostrado satisfecho por la buena marcha de las obras, cuyo presupuesto de ejecución asciende a cerca de dos millones de euros. El resultado final convertirá la avenida en uno de los ejes principales sobre los que se articulará el desarrollo del Concello de Tomiño y retirará el tráfico de paso del núcleo de O Seixo.