Un grupo de vecinos de Baredo regresó ayer al Concello de Baiona para protestar por el retraso de la modificación del PXOM que elimine el rastro del campo de golf y devuelva a los terrenos la calificación de rústicos. Tras reclamar por escrito una reunión con el alcalde, Ángel Rodal, desplegaron camisetas y pancartas durante el pleno y el regidor los emplazó para un encuentro en dos semanas.

El Concello contrató a la empresa que redactó el Plan Xeral, Interurban, los trabajos para retirar la reserva de terrenos de dotación deportiva en la parroquia. Rodal espera que presente su propuesta en los próximos días para remitirla a la Xunta y aprobarla en pleno en cuanto disponga de con los informes sectoriales preceptivos.

Por otro lado, el pleno aprobó la implantación de la zona azul en las calles humanizadas del centro con el voto de calidad del alcalde. El rechazo en bloque de la oposición que considera la media perjudicial para los vecinos de dichas calles, y la ausencia de un edil del PP obligó al regidor a desempatar la votación.