La Asociación de Afectados por la Ampliación de la Autopista no permitirá que queden en el olvido las distintas mejoras acordadas con el Ministerio de Fomento y Audasa en las infraestructuras de las parroquias de Chapela y Trasmañó. Nueve meses después del fin de los trabajos en la AP-9, viales como la calle Pasán, situada junto a la autopista, continúa con firme de tierra a la espera de los trabajos de urbanización, y tampoco se sabe nada de la instalación de las prometidas barreras antirruido en todo el tramo urbano.

"Teníamos unos compromisos firmes con el anterior ministro de Fomento [Íñigo de la Serna] por valor de más de seis millones de euros como contraprestación por los perjuicios causados a los vecinos por las obras de ampliación de la autopista AP-9, y el cambio de Gobierno ahora es un importante revés porque retrasará la tramitación", apunta el presidente del colectivo de afectados, Rafael Baltasar Cela, aunque advierte que no descansarán hasta que se cumpla hasta la última obra prometida. "Todo lo que hemos conseguido ha sido gracias a la presión social, y tenemos claro que seguiremos por esa línea si fuese necesario", afirma.

La Asociación de Afectados se reunió ayer con el alcalde redondelano, Javier Bas, para trasladarle la "inquietud e incertidumbre" que existe entre los vecinos por la ausencia de información sobre estas actuaciones, que llevan meses en trámites administrativos por parte de Fomento para incluirlas como una adenda al proyecto de la ampliación de los carriles en la AP-9.

Los afectados también han remitido un escrito al Ministerio de Fomento, dirigido al propio ministro José Luis Ábalos, en el que se explica puntualmente la relación de las actuaciones comprometidas, todas ellas acordadas en la comisión de seguimiento de las obras de ampliación, y también se adjunta una copia del escrito a la Delegación del Gobierno en Galicia, a la Consellería de Infraestructuras de la Xunta y a los responsables de la demarcación de Carreteras.

Entre las actuaciones acordadas para las parroquias de Chapela y Trasmañó se incluye la urbanización de la Estrada do Torreiro, Pasán, Camiño Mouriño, Fonte do Cornido y la ampliación del puente de Trasmañó, con una inversión prevista, incluyendo la propia obra, así como las expropiaciones y asistencias técnicas necesarias, de 3,7 millones de euros.

A esta cantidad también hay que añadir la inversión prevista para la instalación de pantallas sonoras y otras actuaciones para la reducción del ruido, estimada en 2,8 millones de euros.

La única obra en marcha es la construcción del nuevo colegio de Igrexa, estimado en 4,6 millones de euros.