La actividad en Xesnatura continúa a pesar de que parte de sus instalaciones fueron devastadas por las llamas en un incendio la noche del martes. Ayer, la veintena de operarios que trabajan en esta planta porriñesa de tratamiento de residuos situada en el polígono de As Gándaras acudían a sus puestos como cada día, aunque variando sus tareas, ocupándose en esta ocasión de la limpieza y vaciado de escombros.

Los daños aún sin cuantificar con exactitud se auguran elevados, aunque no tan cuantiosos como lo fueron los provocados por el incendio que registrara la misma nave en el año 2008. Entonces el fuego arrasó el interior por completo afectando gravemente a la estructura y calcinando por completo la maquinaria. "En esta ocasión las llamas afectaron a un tercio de las instalaciones, resultando dañada la cubierta y la parte inicial de la cadena de reciclaje, quemándose residuos aun sin procesar y salvándose todo lo demás, de ahí que continuemos ofreciendo a todos nuestros clientes el servicio con normalidad", explica Óscar González, gerente del Grupo González Couceiro, así "el trabajo que no se pueda llevar a cabo en Xesnatura se trasladará a otra planta", indica refiriéndose al otro centro de tratamiento de residuos (Serco), ubicado a unos metros, en el mismo polígono, el cual precisamente también fue pasto de las llamas hace cuatro años.

Xesnatura es un centro para la clasificación y selección de residuos industriales y urbanos en el que se procesan unas 100 toneladas diarias de madera, plástico, cartón y vidrio. Es, por tanto, esa la cifra que ayer estimaba la empresa pudiera haber ardido durante las tres horas que, aproximadamente, duró el incendio.

Accidental

Durante la noche, esta nave está sin actividad. Fue a través de la central de alarmas como se percataron de lo sucedido, "pues el último operario salió sobre las 20.30 horas y todo estaba correcto; fue sobre una hora después cuando se dio aviso de lo sucedido", indica su gerente. A la espera de una investigación oficial, la causa que más peso cobra es la de un incendio fortuito, como ya ocurriera hace diez años.

La intensidad del fuego hizo que la Axencia Galega de Emerxencias (Axega) activase el protocolo para la colaboración transfronteriza en materia de emergencias. Así se movilizaron a los bomberos del Baixo Miño, Salnés, Morrazo, Vigo, Ponteareas y Valença, además de los miembros del GES de A Guarda y los equipos locales de emergencias de Mos y Porriño, participando también el grupo de apoyo logístico de la Axega. Poco después de la una de la madrugada lograron estabilizar el fuego hasta su extinción sobre las cuatro, permaneciendo hasta por la mañana como retén de vigilancia los bomberos del Baixo Miño y el grupo de apoyo logístico del 112 Galicia.

Al lugar del incendio acudieron el teniente de alcalde de Porriño, Manuel Carrera y los concejales de Industria y de Seguridad, Marcelino Coto y Lourdes Moure, respectivamente, acompañados del diputado provincial Carlos López Font. Carrera destacó "la buena coordinación y rápida intervención de los medios, clave en la extinción de las llamas consiguiendo salvar parte de la maquinaria". También estuvieron el delegado de la Xunta en Vigo, Ignacio López-Chaves y el presidente del PP local, M. Alejandro Lorenzo.