Los alumnos de la escuela infantil de A Galeriña, en Pazos de Borbén, volverán este curso a la misma escuela en la que aprendieron y jugaron muchos de sus padres y abuelos: la vieja escuela unitaria de Nespereira.

El retorno a las antiguas aulas se produce por petición de los propios padres de los alumnos, que el año pasado solicitaron estudiar la posibilidad de volver a dar las clases en el inmueble, que se encontraba sin uso desde hace varios años, cuando se trasladaron las clases a la conocida como "Casa do Mestre". Tras varias reuniones entre el profesorado y el gobierno local estudiando la viabilidad del proyecto se decidió arrancar con una reforma que, por el estado de deterioro de la edificación, necesitó un largo proceso de rehabilitación con diferentes fases.

La reforma comenzó a finales del pasado año garantizando las condiciones de habitabilidad del aula principal, retirando todos los viejos enseres, revisando los elementos de climatización, la instalación de un nuevo suelo y diversos trabajos de pintura y fontanería en los baños adaptados para los niños. Además, desde el profesorado se invirtió parte del presupuesto del centro para adquirir nuevos muebles de soporte y almacenaje para adaptarse a las actuales dimensiones del aula, más espaciosa que la usada anteriormente.

La segunda fase, con las obras más importantes, se realizaron durante este verano con la instalación de un nuevo acceso al centro, más amplio y seguro para la recogida de los alumnos por parte de sus familias, y se mejoró el sistema de desagüe y recogida de pluviales de todo el edificio. También se reformó casi al completo el aula secundaria, que ahora se convertirá en un espacio de psicomotricidad para que los pequeños puedan realizar todo tipo de actividades.

Para adaptar este nuevo edificio se tuvieron que realizar varios trabajos de albañilería, fontanería y electricidad, además de los necesarios para instalar el nuevo suelo y acondicionar por completo el aula, garantizando que cumple con todas las medidas de seguridad y habitabilidad para los niños.

Por último, el aula situada en la antigua casa del maestro, y que hasta ahora daba servicio como escuela de infantil, se convertirá en una sala especializada en trabajos manuales para los proyectos artísticos de los escolares.

El alcalde de Pazos, Andrés Iglesias, visitó los trabajos en compañía del profesor titular del centro para asegurarse que todo esté preparado para el inicio del curso y explicó que esta actuación tiene "una doble finalidad, porque mejoramos muchísimo las condiciones de un centro educativo fundamental en uno de los barrios de mayor población del municipio y a la vez recuperamos un elemento entrañable para todos los vecinos".