El gobierno local de Redondela denunció ayer la situación de "boicot" al que les somete la Diputación con el Plan Concellos, del que permanecen sin recibir las resoluciones de las obras solicitadas desde hace más de cinco meses. La teniente alcalde, María del Carmen Amoedo, asegura que "están paralizando obras de importancia para la ciudadanía solamente por un intento de boicotear la acción del gobierno". La edil advierte que el Concello no puede iniciar los procedimientos de contratación hasta recibir las resoluciones del organismo provincial, "por lo que a este ritmo las obras se demorarán meses", puntualiza.
La responsable municipal explica que mientras otros municipios están ejecutando ya las obras del Plan Concellos, Redondela sigue esperando. "No hay ningún requerimiento pendiente ni nada, simplemente no se despachan porque no interesa", indica Amoedo.
La mayoría de los proyectos con la solicitud fueron enviados el 23 de marzo y otros el 4 de abril, un tiempo que desde el gobierno redondelano consideran "más que suficiente" para revisarlos. "Lo más sorprendente es que ni siquiera se resolvieron los suministros, que son simples compras sin proyecto para revisar, como puede ser el caucho para los campos de fútbol o las canastas para la pista de baloncesto de la Alameda", señala.
Entre las obras pendientes de resolución se encuentra la reparación de las deficiencias de la piscina municipal de Chapela, la renovación del saneamiento de la calle Patrimonio, Camiño Mouriño, Paparoxa y Rabexa de Chapela, el acondicionamiento de los caminos San Pote y Arango de Cedeira, la adquisición de un piano de cola para el multiusos, las cortinas del pabellón de A Marisma, el suministro de caucho para los campos de fútbol y las nuevas canastas de la alameda, entre otros.
