El gobierno de Ponteareas, que encabeza el alcalde nacionalista Xosé Represas, decidió retirar del orden del día para el pleno de ayer los presupuestos de 2018 después de que Esquerda Unida (EU) anunciase, en la comisión informativa previa del lunes, que si el ejecutivo local no incluía explícitamente partidas en los presupuestos para sus propuestas, el concejal Lino Costas votaría en contra y, por lo tanto, salvo ausencia de un edil de la oposición el documento económico no saldría adelante. Los diez votos del gobierno local (BNG-PSOE-ART) no serían suficientes al haber anunciado PP y ACiP su votación en contra.

"Consideramos positiva la decisión de la junta de gobierno de aplazar los presupuestos de 2018 a un próximo pleno para modificar el documento en la línea que solicitó EU y para avanzar en la negociación de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) y del acuerdo de funcionarios", señalan desde la agrupación de Costas.

A pesar de que en los presupuestos se contempla la reserva de crédito para la negociación de la RPT del Concello, Esquerda Unida considera que "se debería avanzar más en las negociaciones antes de llegar a la aprobación presupuestaria".

EU critica la "falta de voluntad política por parte de la junta de gobierno para avanzar en la RPT cuando convoca la reunión de la mesa de funcionarios, por primera vez desde febrero de 2016, un día antes del pleno ordinario al que pretendían llevar los presupuestos de 2018". Además, según explica Lino Costas, esa convocatoria se produjo ante la insistencia de Esquerda Unida para finalizar con la negociación de la RPT y el acuerdo de funcionarios antes de la aprobación de los Presupuestos.

Tras conocer que las exigencias de Esquerda Unida para apoyar el Presupuesto eran inamovibles, la junta de gobierno se comprometió a convocar una nueva reunión de la mesa de funcionarios y de la mesa general antes de volver a llevar los presupuestos a pleno, momento en el que Esquerda Unida podrá valorar el estado de las negociaciones para decidir el sentido de su voto.

Por su parte, EU aseguró "tener voluntad" para aprobar los nuevos presupuestos para 2018, que considera "positivos en algunos aspectos", por lo que será una vez resueltas sus exigencias, cuando EU podrá apoyar los presupuestos, como decidió que haría en su asamblea municipal abierta.

Además de avaces en la RPT y en el acuerdo de funcionarios, EU exige una partida para iniciar la amortización licencias de taxi y para una cocina municipal.

Cocina municipal

El gobierno local se comprometió en la reunión del pasado lunes, previa al pleno, a incluir en el presupuesto una partida específica para un estudio de viabilidad de la futura cocina municipal. "Es un hecho que aunque no llega a lo solicitado estamos dispuestos a aceptar si se incluye claramente en los presupuestos", afirman desde EU.

La agrupación de Lino Costas considera "urgente la creación de una cocina municipal, tal y como existe en otros ayuntamientos, que atienda las necesidades de los comedores escolares y de las familias en exclusión social". Además considera que favorecería el consumo de productos locales.

Por otro lado, EU solicitó al gobierno que los presupuestos contemplasen la amortización de plazas de taxi y que contasen con una partida suficiente para poner en marcha una cocina municipal. En su propuesta de presupuestos, el gobierno local ya había incluido su compromiso de iniciar la amortización de plazas de taxi con una partida de 36.308 euros.