Serán dos de los cuatro miembros del gobierno del PP de Oia los reprobados por la Corporación municipal en menos de un mes. El primero fue el teniente de alcalde, Eugenio Portela, por no haber abonado nunca el recibo de la basura correspondiente a su tapería, para la que obtuvo licencia en febrero tras siete años de actividad, en el pleno ordinario del pasado jueves. La oposición hizo valer su mayoría para aprobar el toque de atención al edil y volverá ha hacerlo en las próximas dos semanas en otra sesión extraordinaria pendiente de convocatoria para "tirar de las orejas" de manera oficial a la alcaldesa, Cristina Correa, por "proteger" a su compañero y tratar de justificar la irregularidad en el abono de la tasa "enganando aos veciños".

El portavoz del PSOE, Gerardo Rodríguez, el número dos de Converxencia Galega, José Manuel Romero, y el concejal del grupo mixto Xoán Lois Vila, presentaron ayer una solicitud conjunta de pleno extraordinario para reprobar a la regidora, que deberá convocarlo en el plazo de 15 días, según marca la normativa.

La oposición mostrará en esa sesión su repulsa unánime a la reacción de Correa tras destaparse los impagos del teniente de alcalde y concejal de Medio Ambiente. La alcaldesa respaldó al edil y justificó que la tasa estaba abonada, pero en concepto de vivienda particular -de menor importe- porque el local está instalado en una antigua casa reformada y, como era ilegal, no podía darse de alta en el padrón de contribuyentes. Precisamente ayer la regidora confirmaba que el establecimiento ya se encuentra registrado.

Socialistas, "converxentes" e independiente aprovecharán el debate plenario para reprochar a Correa su "inacción" ante diversos problemas que padece el municipio, como las anomalías en el cobro de la tasa de recogida de residuos, "que precisa unha actualización para que todo o mundo aporte o que lle corresponde ao erario público", las deficiencias en el sistema de tratamiento de aguas residuales con constantes averías de las minidepuradoras, la orden de derribo del hotel balneario Talaso Atlántico o el deterioro del monasterio.

Afearán asimismo su "falta de diálogo". Los representantes de los tres grupos insisten en que "cun goberno de 4 concelleiros, que representa a 600 votantes, non se poden tomar decisións unilaterais, sen contar para nada cos 7 concelleiros da oposición, que representan a 1.100 electores". Como ejemplo de ello esgrimen las propuestas de inversión que el Ayuntamiento ha remitido a la Diputación para ejecutar el Plan Concellos, que "foron impostas, en lugar de consensuadas entre os grupos".