Los presidentes de la Asociación de Empresarios de Mos (Aemos), Manuel Castro, y la Asociación de Empresarios del Transporte de la Provincia de Pontevedra (Asetranspo) Ramón Alonso, pidieron ayer a sus asociados la participación en la protesta para que se reanuden las obras de la autovía entre Porriño y Vigo.

La movilización tendrá hoy a las 20.00 horas, en el Concello de Mos.

Los empresarios mosenses consideran que el estado de esta autovía es muy lamentable. "Se trata de una vía saturada, que soporta flujos diarios cercanos a los 70.000 vehículos y, paradójicamente, se encuentra en situación de abandono, deprimida y muy alejada de lo que serían sus necesidades reales", dicen. "El vial -dice Aemos-, lejos de ser una solución como en su día se planteaba, es un problema que no da respuesta a las necesidades de los que deben utilizarla y aleja a los habitantes del área de Vigo, perjudicando especialmente a los empresarios", indica Manuel Castro, que recuerda que Aemos lleva varios años urgiendo una conexión de la autovía con el Parque Empresarial de A Veigadaña - un área industrial creada en 2009, situada en las inmediaciones de la A55, sin que hubiera sido posible. Además destacan que la ausencia de transporte público que conecte las distintas áreas industriales de Vigo obliga a un mayor tránsito y que la situación de mantener una obra paralizada durante dos años, sin explicación pública alguna, es un hecho que refleja el poco interés del Ministerio de Fomento en esta área.

Por parte de Asetranspo, en la persona de su Presidente, Ramón Alonso, se asegura que los transportistas sufren especialmente los problemas de este vial, y recuerdan que existen numerosas empresas de transporte con una parte importante de sus tráficos sobre el trayecto Vigo-Porriño-Vigo. En estos supuestos, si en cada viaje se pierden 10 ó 15 minutos, al final del día resulta un viaje menos, debido a las limitaciones de tiempo de conducción y descanso impuestas por la normativa de tacógrafo.

Con respecto a la seguridad "ahora mismo desconocemos la velocidad máxima permitida en algunos tramos, si a 60 ó a 80 km/h, por que cuando se inició la obra se señalizó a 60 km/h y, a pesar de suspenderse los trabajos, se mantuvo dicha limitación" explica Ramón Alonso.

Tanto para Asetranspo como para Aemos, la solución definitiva pasa por la construcción de un túnel desde Bembrive a Petelos, no obstante, mientras la misma no sea una realidad urge la finalización de las obras que estaban en ejecución y han sido paralizadas. Es urgente que se termine esta obra y se liberalice además la autopista de peaje que une Puxeiros con Porriño.