El alcalde de Baiona, Ángel Rodal, acaba de anunciar la anulación del campo de golf de Baredo. Su equipo de gobierno ha decidido finalmente descartar el proyecto y devolver los terrenos, 675.000 metros cuadrados de monte comunal, a la calificación de rústico protegido. Para ello, ha asegurado ante los medios, se iniciará en breve la tramitación de una modificación puntual del plan xeral que elimine la dotación deportiva en la zona.

Rodal justifica la decisión por un incumplimiento por parte del equipo redactor del Plan Especial de Dotacións e Infraestructuras das Costeiras. Según ha explicado, la sociedad se había comprometido a contestar las más de 3.000 alegaciones e informes sectoriales en un plazo de dos meses y no lo ha hecho.No ha tenido que ver en ello la presión social contra el proyecto, ha indicado a preguntas de este diario. "Nosotros no podemos gobernar en función de protestas vecinales, sino en función de la legalidad y los informes técnicos", ha recalcado.

El Concello encargó el diseño del complejo deportivo a la UTE González Souto y Luque, Aseguinolaza y Asociados en junio de 2015. Dos años más tarde, el documento se presentaba a los grupos de la oposición y a las comunidades de montes y aguas de Baredo y en agosto se ponía en marcha el primer plazo de exposición pública y recogida de alegaciones. Tras recoger más de mil recursos en contra en esta primera etapa, el gobierno local abrió un segundo período, que finalizó con otras 2.000 presentadas.

La gran mayoría de los vecinos de la parroquia se han movilizado desde entonces para mostrar su rechazo al plan del Concello. Consideraban que amenazaba sus reservas de agua,su salud por el empleo de pesticidas nocivos y la biodiversidad del entorno. Han tramitado cientos de alegaciones y organizado diversas protestas. Las últimas, la comparsa de Entroido y la intervención en el último pleno de la Diputación. Esta tarde, la parroquia recibirá al alcalde, que se desplazará al centro cultural para comunicar la decisión.