La mejora de calidad de vida de Jairo desde que se trasladó de Tenerife a Ponteareas es más que evidente. Este joven, que en octubre cumplirá 16 años, sufrió una hemorragia cerebral a los cuatro meses y aunque, en aquel momento, fue operado le quedaron grandes secuelas tanto físicas como psíquicas que lo postraron en una silla de ruedas y con muchísimas limitaciones. Hace tres años se vino junto con su madre Emi Luis y su hermana María a vivir a Ponteareas en busca de un progreso en esta larga lucha, el cual ha llegado gracias a todas las terapias a las que acude periódicamente y sobre todo a la intervención de miotenofasciotomía a la que fue sometido, el pasado 13 de junio, en el Policlínico de Barcelona en la cual eliminaron las retracciones musculares con una técnica quirúrgica muy precisa, breve (30 minutos de cirugía) y sin abrir. Precisamente, Emi acompañada de sus hijos explicó ayer en el Concello de Ponteareas, en un acto en el que también estuvieron presentes dirigentes municipales, los resultados de la intervención que costó 7.000 euros y que pudieron financiar con lo recaudado en la subasta de las Meninas del año 2016 y en otras campañas solidarias. "Ya se aprecian muchas mejoras, así antes no era capaz de levantar el brazo izquierdo ni utilizaba la mano de ese lado y ahora sí, antes apenas se mantenía de pie porque no tenía equilibrio y ahora ya corre y también ya es capaz de masticar sin babar, además de haber eliminado el dolor muscular que padecía hasta entonces". Por otra parte, los terapeutas aseguran que este avance físico repercutirá en la parte psíquica, "como él se ve capaz de hacer cosas que antes no hacía, eso hará que también se produzcan cambios en el aspecto psíquico".
Su familia agradece enormemente todas las acciones desinteresadas y ayudas recibidas para desarrollar un tratamiento que le permita a Jairo llevar una vida mejor, pues "la sanidad pública no cubre casi nada, los recursos que ofrecen son muy limitados, todo lo que estamos haciendo es de pago". Durante el curso escolar acude al CEE Saladino Cortizo en Vigo y además monta en bici con Discamino, va a sesiones de logopeda a través de una beca escolar, a terapia ocupacional y a fisioterapia. Otro ejemplo de esa mejora y evolución se aprecia a simple vista, "pues cuando llegó de Tenerife, con 13 años pesaba 21 kilos y ahora 50, dando también un importante estirón".
Con todo, su madre apunta que "dentro de lo malo somos afortunados" refiriéndose a que Jairo les permite hacer vida normal, "ir al parque, dar un paso o estar en una cafetería".
El siguiente paso a dar ahora es la aplicación del método Tomatis, que recibe este nombre por su fundador el doctor Alfred Tomatis. "Se trata de estimular parte del cerebro a través de la música", explicaba Emi, que dijo poder desarrollarlo en el centro Volteretas de Vigo.
A mayores de estas limitaciones, que van progresando a muy buen ritmo, el otro problema a atajar en el caso de Jairo es la epilepsia, para la cual toma 16 pastillas más un jarabe a diario. En este aspecto, su madre asegura que su neumólogo pediátrico le habló de dos intervenciones posibles, a través de la Seguridad Social, "admitiendo que serían viables para Jairo, pero sin embargo este nunca dio el paso para hacer posible esa operación. Las esperanzas están puestas ahora en que, por su edad, al cambiar de pediatra a médico este vea factible la intervención y la ordene"
Con el acto de ayer, Jairo y su familia, y también el Concello de Ponteareas, quiso visibilizar las dificultades que pasan muchas familias, que no reciben apoyos en materia de sanidad pública, y que se acogen a campañas solidarias para llevar a cabo tratamientos e intervenciones. Así, justificaron la inversión del dinero recaudado, sobre todo teniendo en cuenta los últimos casos de fraude en este tipo de situaciones.
