Un aparatoso accidente de tráfico generó tensión en A Ramallosa. Un turismo rompió un muro y acabó sobre una finca ubicada en el número 40 de la Avenida de Portugal, en las proximidades de la plaza de abastos. El conductor, un vecino de Baiona, se había quedado dormido al volante y salió ileso del siniestro, pero el coche quedó suspendido sobre la tubería del gas. La operación para retirarlo obligó a cortar el suministro para evitar fugas.

Sucedió en torno a las 15.15 horas. El vehículo circulaba procedente de Gondomar en dirección al centro de A Ramallosa, atravesó el carril contrario y acabó rompiendo el cierre de hormigón de una propiedad privada. Su parte delantera quedó sobre la finca y la trasera, suspendida en el aire en el arcén. Bajo el chasis, el cuadro de contadores de la casa y la conducción del gas.

El conductor salió por su propio pie del coche y no requirió asistencia médica. Lo complicado fue la retirada del coche, que finalizó en torno a las seis de la tarde. Los bomberos del GES Val Miñor confirmaron que no existía ninguna fuga de gas avisaron a los técnicos de la compañía, que decidieron cortar el suministro para llevar a cabo la operación con garantías de seguridad. Una grúa pluma tuvo que levantar el coche en peso para evitar romper la tubería con el arrastre. Al lugar acudió también la Guardia Civil.