Los vecinos de los barrios de Japón y Parada, en Chapela, reclaman una remodelación de la señalización en la Avenida de Redondela que permita realizar el giro a los vehículos que acceden a la Subida de Parada procedentes de Redondela, o para salir de la calle en dirección a Vigo. Los residentes de la zona iniciaron en los últimos días una recogida de firmas para esta propuesta, que llevan reclamando desde hace años sin que se atienda a sus demandas ni desde el Concello ni desde Fomento -administración que tiene las competencias sobre el vial-.
Ante esta situación, la asociación de vecinos de Chapela ha mostrado su apoyo a la iniciativa de los afectados, que ya logró más de 130 firmas de apoyo, y trasladó el problema a la Alcaldía para que inicie las gestiones ante la Demarcación de Carreteras del Estado para buscar una solución adecuada.
La maniobra que demandan los vecinos estaba permitida en esa intersección hasta el año 2009, cuando se reformó la carretera y se suprimió en ese punto la línea discontinua que habilitaba el giro. Esta situación obliga a los vecinos a realizar un desvío de 500 metros hasta la rotonda de la salida de la autopista de Teis en el caso de intentar acceder a la Subida de Parada procedente desde Redondela, y en el caso de salir hacia Vigo desplazarse hasta la glorieta del acceso a la AP-9 en las inmediaciones del centro de salud.
Los residentes de la zona consideran que existen medidas de escaso coste para solucionar el problema, como anular el aparcamiento en uno de los laterales y pintar una isleta con un "stop" en el centro de la calzada para permitir el giro, de forma similar a la que existe en esta misma carretera en el acceso al pabellón de deportes y al instituto de Chapela o en la Subida a Cidadelle, en el barrio de Igrexa.
Por otra parte, los residentes de la zona de Parada también se quejan de la ausencia de letreros indicativos en el vial, del mal estado del asfalto, de la ausencia del servicio de limpieza en la zona, con las márgenes llenos de maleza. Además proponen que se prohíba el estacionamiento en la confluencia con el Camiño da Pomba para facilitar las maniobras de los vehículos.
