El grupo político Manifiesto Miñor, al que pertenece el concejal de Comercio de Gondomar, Xosé Antón Araúxo, emitió ayer un comunicado de apoyo a su edil tras las protestas de los placeros, en el que afirman "que nadie de los actúales placeros perderá su puesto de trabajo, entre otras razones, porque actualmente hay doce puestos vacíos que llevan años en esa situación".

El grupo hace un llamamiento a todos a los placeros a dialogar para resolver una situación "de la que todos vamos salir beneficiados; a que presenten sus propuestas antes de 25 de mayo, con el compromiso de reunirnos el día 26 para valorar la situación".

Además manifiestan "el total apoyo y respaldo al concejal de Comercio, Xosé Antón Araúxo, por su impecable labor a favor del comercio local de Gondomar en general, y de la Plaza de Abastos en particular".

Quieren dejar claro "nuestro respeto absoluto y escrupuloso al derecho de los placeros a manifestarse y a dar su opinión" pero lamentan "que este tipo de posicionamientos cerrados al diálogo, ni favorecen la imagen de la Plaza de Abastos ni a los negocios de los propios placeros".

Por otra parte insisten en que la necesidad de regularizar administrativa y legalmente la situación de los placeros es inaplazable, entre otras razones, para poder optar a los programas y ayudas de Europa, del Estado, de la Xunta, etc. "Sin ese requisito no es posible acceder a las mismas, por lo que sacar a concurso los puestos vacíos no resolvería el problema", añaden.

También aclaran que no se trata de una subasta de puestos "como se está diciendo públicamente con insidia y mala intención". "Se trata de un concurso publico regulado por unas bases y ajustado a la Ley, unas bases que por cierto le dan 15 puntos sobre 50 de ventaja a los placeros de la Plaza de Abastos".

"El funcionamiento de la Plaza de Abastos de Gondomar, le suponen al Ayuntamiento una carga considerable que financia todo el vecindario con sus impuestos con el objetivo de que sea un elemento dinamizador de la economía local por ser un elemento singular que no todas las Villas tienen. La ciudadanía de Gondomar debe saber que los placeros establecidos en ella, además de hacer un uso exclusivo de un bien público y municipal, no pagan el agua, la luz, la recogida de basura, la tasa de alcantarillas, la contribución (IBI), corriendo también por cuenta del Ayuntamiento a limpieza diaria, la desratización y desinsección regulares, o las obras de mantenimiento. Todo esto por unas cuotas que van de 87 euros a 406 euros/ año por puesto. He ahí la necesidad de poder acceder a las ayudas externas.