Baiona dispondrá este verano de cuarenta plazas de aparcamiento extra en pleno centro. Un espejismo que durará tan solo hasta el otoño, ya que estos espacios están diseñados como alternativa a los 55 estacionamientos que se quedarán en 12 en otoño en el puerto pesquero, cuyo acceso será reformado con una glorieta y un espacio de disfrute público. Las nuevas zonas de parking se repartirán en tres puntos. Cabrán 16 vehículos en batería sobre la zona verde del paseo marítimo, entre 6 y 8 enfrente, en la calle Alférez Barreiro, y otros 16 en diagonal en la Avenida Monterreal. Así lo explicó ayer el alcalde, Ángel Rodal, ante la incertidumbre creada en el entorno por el desmontaje del área ajardinada que separa la senda peatonal de la calzada.

Operarios de la constructora Narom, contratada por la Xunta para ejecutar la transformación del muelle y pavimentar toda la travesía urbana del municipio por 400.000 euros, retiran con una excavadora el parterre anexo al paseo para dar cabida a los nuevos estacionamientos. Lo hacen "aprovechando la primera fase del proyecto, que implica un coste de 100.000 euros", explica el regidor. Tras concluir el fresado de los puntos más deteriorados desde A Ladeira hasta el paseo Pinzón, está prevista la pavimentación continua de toda la travesía urbana. "Sería ilógico asfaltar ahora y volver a romper después del verano para crear estos aparcamientos", argumenta el regidor.

Los trabajos actuales concluirán en dos semanas, según los cálculos de Rodal. El estrechamiento del paseo marítimo permitirá mover el eje de la calzada, por lo que se ganará superficie enfrente para dejar sitio a los coches y también a los contenedores que se desplazarán desde el muelle a Alférez Barreiro, a pocos metros de la escuela municipal de música.

El gobierno local pretende evitar que los conductores dejen sus vehículos por tiempo prolongado estos nuevos parkings. Para ello, señala Rodal, estudia implantar la zona azul gratuita, como la existente en Julián Valverde o en Carabela Pinta. "Esta zona debe registrar un flujo continuo de coches, por su carácter comercial y hostelero. Para dejarlos durante horas tenemos otros lugares como Os Tendais", indica.