Enseñar las raíces, y más si estas son profundas. Queda poco más de un mes para que el Concello de Salvaterra celebre sus más de mil años de historia (el próximo 24 de mayo, día declarado por el pleno como festivo local) y en esta ocasión quiere hacer partícipes de este tremendo peso histórico a los más pequeños. Por ello ha convocado el primer Certamen Artístico "Salvaterra Milenaria" para que los niños y niñas trasladen su visión, a través de diferentes categorías, de lo que sería en ese instante de la historia. Según la teniente de alcalde, Marta Valcárcel, "el objetivo de este certamen es que el alumnado de los Centros de Educación del Concello nos ofrezcan su visión del pasado de nuestra villa, al mismo tiempo que se fomenta su imaginación y creatividad, así como la participación en las actividades culturales del Concello". Se establecerán diferentes categorías, atendiendo tanto a la disciplina utilizada como a la edad de los participantes. El jurado estará compuesto por personal docente de los centros escolares y del propio Concello.

Así, los niños de Infantil participaran dentro de la categoría de dibujo, los de primaria y secundaria en manualidades y bachiller en relato corto. Todas las categorías estarán premiadas con 3 premios, de 100, 75 e 50 euros, para gastar en material escolar, informático, deporte o vestimenta. Todos los trabajos serán expuestos en la web del Concello y en las Covas de dona Urraca el día 24 de mayo, día en el que se hará también entrega de los premios, dentro de los actos conmemorativos que ofrecerá el recinto amurallado a sus visitantes durante la festividad local.

El Concello explica que "en el año 991 encontramos el primer documento escrito que hace referencia a Salvaterra de Miño, lo que la convierte en una auténtica villa milenaria". En este contexto, explican desde el Consistorio que "el monarca Vermudo II firmaba, un 24 de mayo de 991, un documento en el que le cedía a la iglesia compostelana y a su obispo Pedro Martínez de Mosoncio, la vila de "Lacedorium", que fue el nombre originario del pueblo". Esta vinculación entre Salvaterra y la iglesia compostelana se mantendría durante un largo período, "hasta bien entrado el siglo XIX, durante el cal, los vecinos pagaron el diezmo a la sede santiaguesa".