Alberto Gándara es la nueva cara de un negocio familiar fundado por sus padres en 1987 en Vilariño, la panadería O Bastón, que se consolidó en la comarca durante los años noventa con una plantilla inicial de 9 empleados, 150 metros cuadrados de obrador, un horno con capacidad para 200 barras y retos destacables como las empanadas gigantes de la parranda de San Roque.

Sus inquietudes lo han llevado a ampliar el negocio y trasladar hace poco más de un año su centro de operaciones a Porto do Molle, donde ha triplicado producción y plantilla, con tres hornos de 240 barras cada uno y 26 trabajadores.

La actividad continúa en crecimiento y el emprendedor espera alquilar en breve la nave anexa a la actual para instalar otro horno y una gran cámara frigorífica de almacenaje, además de crear otros cinco puestos de trabajo.