El incendio de un turismo en la autovía A-55 a las 12.00 horas del mediodía de ayer provocó importantes retenciones durante algo más de una hora. El accidente se produjo en el kilómetro 10 de esta vía en sentido Porriño y las causas exactas que provocaron que el vehículo comenzara a arder de forma virulenta todavía se desconocen.

Prácticamente la totalidad del coche quedó absolutamente calcinada, si bien el conductor, único ocupante del mismo, tuvo tiempo de echarse al arcén y salir del habitáculo antes de que sufriera ningún tipo de daño personal y tras percibir que del motor comenzaba a salir humo y algunas llamas. No hubo que lamentar tampoco más daños materiales.

El coche pertenecía a una empresa del sector de las máquinas recreativas, por lo que según informaron algunos de los efectivos que participaron en las labores de apagado y descongestión del atasco generado, transportaba en el maletero varios miles de euros en efectivo, de los cuales una parte pudo ser salvada porque parte de este efectivo se encontraba en monedas.

El carril en el que se produjo el suceso no llegó a ser cortado por completo, teniendo que ser desviado el tránsito por la parte izquierda de la vía. Los trabajos de apagado y posterior retirada del vehículo duraron aproximadamente una hora, por lo que a las 13.00 horas ya se circulaba con normalidad. Bomberos de Baixo Miño, Servizo de Emerxencias Municipal de Mos y una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico fueron los diferentes equipos de seguridad encargados de manejar la situación.