El último pleno ordinario de Ponteareas ha sido suspendido por parte del alcalde al no acatar, el concejal del PP, Domingo Freitas, la orden de abandonar la sesión "por su falta de respeto y comportamiento reprobable", señala Xosé Represas. Sobre las 22.00 horas del martes, y cuando se debatía el escrito presentado por ACiP instando al gobierno a iniciar el expediente para la contratación del servicio de vigilancia y control mensual de los servicios de recogida de residuos y limpieza municipal llevados a cabo por la empresa FCC, el regidor local mandó respetar el turno de palabra a Freitas. "Tras exponer sus posturas ACiP y PP procedí a intervenir, momento desde el cual el señor Freitas no dejó de interrumpirme, advirtiéndole que me dejara finalizar y que seguidamente le daría su turno de palabra", asegura el alcalde, quien, ante la negativa, se vio obligado a expulsarlo tras las tres advertencias que corresponden según se recoge en el reglamento. "Coincidiendo el momento con la hora en que solemos hacer el receso, tras la pausa de 10 minutos, al retomar la sesión se negó a obedecer la orden por lo que me vi en la obligación de suspender el pleno", explica el regidor y presidente de la corporación municipal. "Ya no es la primera vez que este concejal interrumpe en los plenos con malas maneras y ofensas, sin respetar el turno de palabra de los ediles de las otras fuerzas políticas", subraya.

Desde el Partido Popular apuntan que Freitas "simplemente estaba asegurando que el alcalde mentía y faltaba a la verdad respecto de este tema" y valoran la decisión como "una excusa para no seguir con el orden del día, pues ellos ya expusieran sus propuestas, estábamos en un punto el cual no le interesaba, y lo que quedaba por exponer era, en su mayoría, múltiples comparecencias solicitadas por el PP", asegura el portavoz de los populares Salvador González Solla.

Reclamación de un sobrecoste

Precisamente, el punto que quedó a medias, a pesar de ser una propuesta de ACiP, el Partido Popular solicitara que se debatiera conjuntamente con una moción presentada por este grupo en el mes de septiembre y que versaba sobre el mismo tema, a lo que el alcalde accedió. No obstante, tras la exposición, "cuando comenzó el debate e intervino Represas se fue por las ramas no respondiendo a las cuestiones concretas que le preguntábamos".

Tanto ACiP como PP critican la dejadez del gobierno de reclamar a la empresa concesionaria de la limpieza los cerca de 800.000 euros cobrados de más desde el año 2011, pues sostienen que existe un sobrecoste en este servicio de 126.000 euros anuales avalado por diversos informes. "En marzo se comprometió a iniciar una etapa de diálogo con la empresa para llegar a un acuerdo en el plazo de seis meses, pasó el tiempo y a día de hoy continuamos sin resultado alguno, reconociendo que aún no había empezado la negociación", indica Solla.

Desde el PP apuntan a que no se reclamó antes la devolución de este sobrecoste porque "no fue hasta el año pasado cuando tuvimos los informes pertinentes y en los que se proponía la ejecución de una revisión de los precios". Por su parte, desde el gobierno actual aseguran que en el mandato anterior "se malgastaron miles de euros en una auditoría que resultó inútil, como ya se reconoció en su día. Utilizó esta auditoría para forzar a la empresa cara una negociación y como consecuencia de esta gestión incompetente e irresponsable el contrato acabó judicializado mediante denuncia de la empresa al Concello". Represas asegura que, "por el contrario, el gobierno actual logró paralizar el pago inmediato de más de 300.000 euros en concepto de intereses de demora".