Forma parte de la europea Rede Natura 2000 y está considerada Lugar de Interese Comunitario (LIC) por parte de la Xunta, pero todavía le queda un escalón más para alcanzar la máxima protección en el ámbito administrativo. A Foz do Miñor se postula para entrar en la el ranking de humedales de interés internacional de la Unesco. El Concello de Nigrán inicia los trámites para solicitar su inclusión en el catálogo conocido como la lista Ramsar, que adquiere el nombre de la ciudad costera iraní en la que se firmó en 1971 un convenio mundial para la conservación de las zonas húmedas hábitats de aves acuáticas, cuya función se considera imprescindible a la hora de salvar la biodiversidad del mundo. El gobierno local ha decidido poner en marcha las gestiones a raíz de la propuesta del histórico ecologista vigués Antón Lois, educador ambiental que en la actualidad imparte un curso de guías de naturaleza en el municipio con quince alumnos que aspiran a enfocar su futuro laboral como divulgadores de la riqueza ambiental de la zona.

El alcalde, Juan González, ha aceptado el reto del experto. Ambos se reunirán esta semana para dar los primeros pasos hacia "o maior recoñecemento e nivel de protección que nos obrigue a manter a conservación da biodiversidade da Foz e a desenvolver o seu potencial ambiental".

El convenio Ramsar une a 169 en la actualidad -España incluida desde 1982- y abarca un total de 2.242 zonas húmedas, entre ellas cinco gallegas: el complexo intermareal Umia, las rías de Ortigueira e Ladrido, las dunas de Corrubedo, la playa de Valdoviño y la ría del Eo. Según afirman sus bases, "los humedales incluidos en este listado pasan a formar parte de una nueva categoría en el plano nacional y la comunidad internacional reconoce que tienen un valor significativo no solo para los países donde se encuentran, sino también para la toda la humanidad".

Turismo ornitológico

Antón Lois está convencido de que A Foz reúne las características exigidas para formar parte del listado. "É un espazo cun nivel de biodiversidade excepcional, que demanda protección urxente e require da implicación de todos os axentes sociais", afirma. De hecho, la marisma concentra cientos de especies de fauna y flora marina y terrestre, especialmente en otoño. "Agora podemos contemplar o espectáculo das aves migratorias que veñen pasar a invernada procedentes do norte europeo. De feito, aquí se achegan ornitólogos de toda Europa para observalas. Isto é turismo e tamén se pode potenciar como iniciativa de desestacionalización. As redes de turismo ornitolóxico moven miles de persoas interesadas en atractivos moi diferentes aos convencionais de sol e praia. A declaración deste espacio como Ramsar suporía un golpe de efecto para poñelo en valor e divulgalo por todo o mundo", subraya.

Paradójicamente, la importante afluencia de aves convive con unos niveles de contaminación en el entorno que lo mantienen cerrado al marisqueo desde hace siete años. Una coincidencia posible gracias a su singularidad ambiental, explica Antón Lois. "Está integrado na vida urbana e acumula 50 anos de contaminación depositada nos seus lodos. As súas augas tan calmas e a súa vexetación actúan como unha esponxa que acolle un tesouro ecolóxico único", señala. "Pero ese equilibrio tamén é moi fráxil, por iso é tan urxente tomar medidas para protexelo", añade.