Rebelión en la Cofradía de Pescadores A Anunciada de Baiona. Una quinta parte de los miembros de la agrupación de percebeiros ha decidido tomar medidas legales contra la patrona mayor, Susana González, a la que atribuyen presuntas irregularidades en la comercialización del excedente de cupo del percebe, cuyos beneficios se destinan a dietas, facturas telefónicas y gastos generales de los representantes del colectivo. Son veintiséis los percebeiros que firman una denuncia contra ella, presentada el pasado viernes, día 16, en las dependencias del puesto principal de la Guardia Civil en la localidad, para reclamar que se abra una investigación "por un delito de apropiación indebida".

Pese a no haber recibido todavía la notificación de la denuncia, la presidenta del pósito niega haberse saltado la normativa en ningún caso. "A Cofradía non se adica a mercadear con produto ilegal", insiste. Asegura que el sobrante de los cupos -el percebe que se retira a cada mariscador cuando se pesa y supera los 3 kilos fijados por jornada- siempre se ha comercializado debidamente etiquetado y que los ingresos obtenidos se destinan a los gastos de la agrupación por sus gestiones "desde hai moitos anos, porque así o aprobou a asemblea, cuxos membros dispoñen das contas detalladas e nunca presentaron ningunha observación ou queixa".

Incautación de la Guardia Civil

Los denunciantes manifiestan haber comprobado que el pasado día 6 de este mes, ese remanente se depositó en el frigorífico sin pesar ni identificar. La patrona admite que así fue, pero que se documentó después. "Ás veces a dinámica do traballo na lonxa impide etiquetar unha mercancía no momento. Pode ocorrer que se estea pesando percebe e entre un barco para pesar polbo, así que se garda na cámara e se pesa despois", argumenta.

El asunto se puso aquel día en conocimiento de la Guardia Civil, que envió una patrulla a la lonja y se incautó de 30 kilos de percebe que se hallaban en el frigorífico sin identificar. La denuncia recoge estos hechos, pero añade que dichas cajas de crustáceo se reservaban para la fiesta "Mar de Sabores", organizada en el puerto de Panxón los pasados 10 y 11 de septiembre por la Cofradía en colaboración con el Concello de Nigrán. La propia patrona admite que ese era el destino de la mercancía intervenida, unas jornadas de degustación y actividades lúdicas para promocionar el sector y sus productos entre los consumidores, que se "veñen organizando desde que esta directiva tomou posesión para recaudar fondos e contribuir a sacar a Cofradía da ruina económica na que se atopaba".

El texto de la denuncia considera "anómala" esta práctica y solicita a las fuerzas de seguridad que verifiquen si "pudiera existir un proceder sistemático y continuado, encargado por la patrona mayor y presidenta de la agrupación del percebe, para la venta del exceso de cupo de percebe retirado a los mariscadores con el fin de facturarlo a nombre de la Cofradía de Pescadores y destinarlo a desconocidos gastos generales de la agrupación de percebeiros (entre los que se encuentran las dietas e indemnizaciones abonadas a la presidenta, la secretaria y las controladoras, gastos del personal de vigilancia, facturas de teléfonos móviles, entre otros)".

Amenazas

Esta sería la segunda denuncia contra la máxima representante del pósito en las últimas semanas. Uno de los mariscadores presentó otra en el cuartel después de que la Guardia Civil interviniese los citados 30 kilos de percebe. La acusó de amenazas en un enfrentamiento verbal en la lonja y el juicio rápido se celebró el pasado viernes, exactamente la misma fecha en que los veintiséis miembros de la agrupación presentaron esta última demanda.