El municipio de Baiona registra un nuevo incendio, tan solo diez días después de los últimos que arrasaron más de 30 hectáreas de monte y en el mismo lugar, en la parroquia de Baredo. Las llamas se desataban cerca de la medianoche y brigadas forestales de la Xunta, efectivos del Grupo de Emerxencias Supramunicipal (GES) Val Miñor tratan de sofocarlo con al menos cuatro vehículos motobomba en colaboración con la Guardia Civil y la Policía Local.
El principal foco se localiza en las proximidades del campo de fútbol de Val de Martín, en el entorno de la llamada Fonte dos Mortos. Ocurría a pocos metros de uno de los puntos en los que se desencadenaba el desastre provocado la madrugada del pasado 17 de julio. Aquella noche habían sido tres los focos detectados, probablemente obra de las mismas personas, según los primeros datos de la investigación, que dejaba clara su intencionalidad, ante la proximidad horaria de su origen.
El primero se declaraba entonces a las 00.48 horas en la zona de Cabo Silleiro, en las inmediaciones de las antiguas baterías de artillería del Ejército de Tierra, que quedaron arrasadas. Las llamas acabaron en este caso con un total de 19,5 hectáreas de monte raso y en su extinción participaron tres agentes forestales, seis brigadas y 6 motobombas de la Xunta, que lograron lograron apagarlo catorce horas después.
Los otros dos se desataban tan solo unos minutos más tarde en el entorno del mismo campo de fútbol que ayer, a las 1.03 de la madrugada. Arrasaron un total de 10,7 hectáreas y se aproximaron a 300 metros de un conjunto de casas, ubicadas ya en la parroquia vecina de Baíña, en las proximidades del colegio de Fontes. En este caso, intervinieron efectivos del Grupo de Emerxencias Supramunicpal (GES) Val Miñor, además de cinco agentes forestales, cuatro brigadas, 7 motobombas, un helicóptero y un avión del servicio contraincendios de la Consellería de Medio Rural.
