Las obras de ampliación de la autopista AP-9 iniciaron esta semana el derribo de las últimas casas del barrio de Igrexa expropiadas por esta actuación. En total serán una decena las viviendas reducidas a escombros en esta zona residencial de Chapela, donde sus propietarios lucharon durante dos años por un precio justo al rechazar las primeras tasaciones. Finalmente, ante el avance de los trabajos y las presiones de Audasa y Fomento no tuvieron más remedio que firmar su salida, ya que se enfrentaban a un desahucio judicial y una multa.

La piqueta comenzó a actuar a principios de mes en las tres viviendas situadas en el Camiño do Torreiro, junto a la iglesia parroquial, entre los que se encontraba el mesón "A Dorna". En los últimos días derribaron una cuarta casa en el margen contrario de la autopista, en el Camiño Fonte de Cornido, y también realizaron los preparativos en la zona trasera del colegio de Igrexa, donde se derribará un muro del patio trasero.

La actuación también afecta a una casa de dos plantas y un edificio de cuatro alturas ubicado también en el Camiño Fonte de Cornido, este último el inmueble de mayor volumen sobre el que actúa la piqueta. Sus propietarios ya abandonaron sus hogares y la empresa encargada de la demolición, Sánchez Álvarez, ya inició los trabajos por el tejado y los muros de la planta superior.

Existe una última casa en la calle Pasán que también será derribada, aunque todavía no comenzaron los trabajos, ya que los propietarios se encuentran a la espera de la firma de la expropiación con Audasa. En este caso el acuerdo es total, por lo que será la última en caer. Además existe un garaje en Fonte de Cornido incluido en el proyecto, aunque sus dueños afirman que todavía no se cerró la expropiación.