La oleada de robos que sufre la parroquia de Chapela en los últimos meses registró ayer dos nuevos episodios con el asalto durante la madrugada a una cafetería de la Avenida de Vigo y el intento de robo de otra de la Avenida de Redondela.

Los ladrones accedieron durante la noche al bar Kima Bay, situado enfrente del parque de la Alameda, tras reventar la reja de la fachada y romper una puerta de cristal. Al parecer, según explicó ayer su camarero, se sospecha que el asalto fue cometido por al menos dos personas. Una vez en el interior del local, los delincuentes se apropiaron del dinero de la máquina tragaperras y del cambio de la caja. "Debió ser muy rápido, iban solo a por el dinero en metálico porque no se interesaron por las bebidas ni ninguna otra cosa", asegura el empleado. El local también dispone de una máquina de tabaco, aunque no la tocaron.

El otro establecimiento que sufrió el intento de robo fue la cafetería Eiki, donde sobre las dos de la madrugada los asaltantes destrozaron una de las grandes lunas laterales de tres metros de altura con una piedra. Los ladrones golpearon varias veces el cristal, aunque no pudieron acceder al interior ya que salieron huyendo cuando un vecino levantó las personas alarmado por el ruido. Este testigo vio como escapaban tres personas en un vehículo y avisó a la Policía.

Este negocio fue objeto de otro intento de robo hace un mes, el 11 de febrero, en las mismas circunstancias. La propietaria, Alicia Rodríguez, al igual que otros hosteleros de la zona piden más vigilancia policial en la zona para incrementar la seguridad ciudadana, ya que en los últimos meses también se robó en un supermercado de la parroquia y en otro bar.