La falta de iluminación en muchos tramos poblados, la ausencia de aceras, el exceso de velocidad por falta de limitaciones a nivel de tráfico urbano y la carencia de una vía de conexión de la A-52 con la N-120 y el casco urbano son, según el Concello de Ponteareas, gran parte de los problemas que llevan provocando accidentes desde hace décadas en la carretera nacional 120 a su paso por las parroquias de Xinzo, Arnoso, Areas, Ponteareas, Fontenla, Arcos, Santiago de Oliveira y San Lorenzo de Oliveira.

A raíz del último atropello mortal acontecido la pasada semana en Xinzo, los vecinos mostraron su indignación con el Ministerio de Fomento reclamando la puesta en marcha de la tan anunciada "circunvalación" , así como mejoras de acondicionamiento en la propia N-120 en materia de seguridad vial.

El Gobierno local se hace eco de esta demanda y, en busca de soluciones, ha solicitado una reunión urgente con Demarcación de Carreteras del Estado en Pontevedra.

Travesía urbana

Según defienden desde el Concello y los propios vecinos, los accidentes acontecidos son debido a no contar con los elementos de protección y seguridad vial necesarios para los peatones, en una carretera que, tal como recoge el PXOM, es una travesía urbana de Xinzo a Arcos, por lo que "hablamos de un contexto en el que los peatones deben ser la prioridad y no los vehículos", sostiene el alcalde Xosé Represas.