Los conductores de la parroquia moañesa de Domaio llevan alrededor de tres meses sin contar con el servicio de gasolinera. Esto ocasionó múltiples quejas desde entonces, sobre todo porque en las primeras semanas de cierre de la estación unos carteles aseguraban que estaba cerrada por obras, por lo que esta situación no se prolongaría. La realidad es que los trabajos que el propietario iba a acometer, que consisten en la limpieza y correcta protección de los depósitos de combustible, una tarea que hay que completar periódicamente, dieron lugar al inicio de un proceso de transacción del negocio.
La venta aún no está cerrada, pero todo apunta a que los nuevos responsables de la gasolinera serán los gestores de la estación de servicio de Praza de España, en Vigo, que también es de la compañía Repsol. Desde esta estación explican que la venta podría cerrarse en las próximas semanas y, aunque no se atreven a fijar con exactitud una fecha para la reapertura de la gasolinera de Domaio, no descartan que los surtidores estén de nuevo operativos antes de un mes.
Las quejas de los conductores de la parroquia se deben a la ausencia de otra gasolinera a corta distancia. Y es que, desde que cerró el surtidor de Domaio, deben conducir hasta el centro de Moaña o cruzar el puente de Rande y repostar en el otro lado de la ría.
Si deciden acudir a las gasolineras de Moaña les espera un trayecto de hasta 10 kilómetros según el barrio de Domaio en el que vivan.
En estos momentos en todo el Concello de Moaña están operativas solo dos gasolineras: La ubicada en el casco urbano, en la calle Concepción Arenal, y la situada en la PO-313 que conecta Moaña con Marín, a la altura del barrio de Sanchelán.
De todas formas, Moaña es el municipio de la comarca con más servicios de este tipo, pues en Cangas cerró la pequeña del centro y cuenta con la situada en la Avenida de Bueu, también en pleno casco urbano, y la de A Madalena, en la carretera que conecta el casco urbano cangués con Bueu.
En el término municipal buenense únicamente se ubica una estación para repostar combustible: en la carretera hacia Marín situada en la parroquia de Cela.
La gasolinera de Domaio, cerrada desde finales del año 2015, dispone de surtidores en los dos carriles de la PO-551, que pasa por ser la vía principal y más transitada de todo el municipio.
Es también un servicio muy utilizado por los conductores que se dirigen a la autopista AP-9. Además, el tráfico en la zona es alto, sobre todo porque muchos vecinos de Domaio estacionan en el aparcamiento disuasorio o cerca de la rotonda del Corredor para compartir vehículo en sus viajes diarios a Vigo por motivos laborales.
