Las viviendas de protección oficial situadas en Caldelas siguen siendo un cúmulo de problemas. Dos propietarios presentaron denuncias por la diferencia del precio por el que ellos la habían adquirido y el de menor cuantía que el Concello estableció tiempo después. Por este motivo, uno de los propietarios ya cobró 12.700 euros del Concello de Tui, por la sentencia judicial que le condenó también a realizar obras de acondicionamiento para la impermeabilización, erradicación de humedades y pintura. El otro propietario denunciante ha solicitado al Concello lo que supuestamente le corresponde por el sobreprecio que pagó, pero los técnicos han respondido que debe proseguir por la vía judicial.

La concejala de Urbanismo, Yolanda Rodríguez, informa también que técnicos del Concello han iniciado la valoración de la situación de las viviendas deshabitadas del total de 19 que tiene el edificio de Caldelas, con el fin de presentar un informe ante el Instituto Galego de Vivenda e Solo para que se estime en el momento de poder optar a posibles subvenciones que establezca este organismo.