Los vecinos del barrio de Cidadelle, en Chapela, estrenarán hoy su nuevo acceso con la apertura del Camiño do Xílgaro. El nuevo vial responde a una antigua demanda de los vecinos, que llevaban más de dos décadas reclamando a los responsables municipales una solución al embudo en el inicio de la subida a Cidadelle, en el que la escasa anchura del vial impide que se crucen dos coches.

La actuación, financiada por la Diputación con un presupuesto de 180.000 euros, consistió en la apertura de una nueva calle situada a unos cincuenta metros del actual acceso al barrio, por lo que el acceso quedará independiente de la subida a Buraca. De esta forma se despejará notablemente el tráfico de vehículos en el cruce de la Avenida de Redondela donde confluyen ambos viales, ya que ahora solo será de salida para los vehículos procedentes de Cidadelle.

La nueva calle tiene una longitud de cien metros y ocho de anchura, con aceras a ambos lados, e incluye todos los servicios como red de alcantarillado, pluviales, abastecimiento y puntos de luz. Los trabajos se encontraban prácticamente terminados a principios del pasado mes de diciembre, aunque la inauguración se retrasó hasta hoy debido que faltaba por instalar una valla de separación de las fincas colindantes para garantizar la seguridad de los peatones y rematar con el alumbrado.

La asociación de vecinos y el colectivo de afectados por la ampliación de la autopista reclamaron en los últimos días que se dotase de doble sentido de circulación al nuevo acceso a Cidadelle para que fuese totalmente independiente de la subida a Buraca, aunque desde el gobierno local explican que se trata de un proyecto diseñado en la época socialista y que estaba sujeto a una expropiación forzosa, "lo que hacía imposible realizar cualquier ampliación o variación que afectase a lo ya expropiado", pese a reconocer que la actuación era mejorable.

Además lamentan que no expresaran sus quejas antes de ejecutar la obra, ya que se debatió en el Consello Parroquial de Chapela y se expuso al público en el Multiusos del Piñeiral de Crego y en la Asociación Cultural de Cidadelle.