La colisión de un vehículo provocó esta mañana el desplome del histórico cruceiro do Acordo de Gondomar, ubicado en la parroquia de Mañufe. Se trata de un monumento religioso cuya fecha de construcción sitúan los expertos en la Edad Moderna, entre los siglos XVI y XVIII, y debe su nombre al lugar donde se sitúa: un punto estratégico en el que se reunían los dirigentes territoriales de la comarca del Val Miñor para resolver conflictos administrativos, fundamentalmente de lindes. Precisamente por este simbolismo, el lugar fue el elegido por los grupos que integran el tripartito de Gondomar (PSOE, Manifesto Miñor y Gondomar Concello Aberto) para sellar el pasado julio su coalición de gobierno.

El accidente se produjo en torno a las 10.00. Un conductor vecino de Lugo, que viajaba por la Avenida de Portugal en dirección a Gondomar, embistió el cruceiro al realizar el giro para incorporarse a Mañufe. El hombre resultó ileso y su turismo, un Peugeot 308, apenas registró daños, dado que impactó con la parte baja del frontal en el pedestal del monumento. Aunque abandonó inicialmente el lugar, fue localizado poco después por una patrulla de la Policía Local de Gondomar, que había recibido la alerta de un vecino sobre lo ocurrido.

El golpe hizo perder la estabilidad del conjunto, por lo que se cayeron la cruz, el capitel labrado y la propia columna del cruceiro, octogonal y rodeada por una serpiente pétrea. Solo quedó en pie el peto de ánimas que completa la pieza de cantería.

Operarios del departamento municipal de Vías y Obras recogieron los trozos. Colocaron el pilar en su lugar y se llevaron la parte superior, más deteriorada tras el siniestro. No es la primera vez que el cruceiro sufre un incidente de tráfico. Hace años tuvo que ser restaurado por un choque similar.