Xoán Martínez Tamuxe, historiador, arqueólogo y escritor, nacido hace 84 años en O Rosal, será homenajeado el próximo lunes en su localidad natal, coincidiendo con la XXVIII Romancha do Cabaqueiro, un sector de la población por la que se ha interesado especialmente, estudiando su historia y su jerga. El Concello de O Rosal reconoce su dilatada labor investigadora, de estudio y divulgadora. Gracias a él permanece recogida en páginas de sus numerosas publicaciones. Martínez Tamuxe fue sacerdote durante 15 años. Se secularizó en 1975 y ejerció de profesor en colegios de O Condado, Baixo Miño y Val Miñor. Colaboró con varios periódicos y se jubiló siendo guarda-encargado del Museo Arqueológico y del Poblado Galaico-Romado de Santa Trega, en A Guarda.

-¿Qué representa para usted el homenaje de su propio pueblo?

-La verdad estoy sorprendido y agradecido, ya que no son frecuentes este tipo de reconocimientos en vida y además en donde nací

-¿Cómo y cuando le empezó a interesar la jerga e historia de los cabaqueiros

-Yo, como la mayoría de rosaleiros, tuve familiares cabaqueiros, pero comencé a interesarme, máxime, por conocer su jerga (verbo o latín de los cabaqueiros) en 1974. Una comisión de fiestas del pueblo me invitó a realizar una publicación sobre su historia, pidiéndome que escribiese una follaca (carta) en el verbo, y así lo hice. Pero ya de lleno, con la erección del monumento al cabaqueiro ("daorde de lurio") en 1987, obra del escultor José Antúnez, en la Praza do Calvario.

-¿Se les ha reconocido justamente su duro trabajo elegido para poder mantener a sus familias que quedaban en O Rosal o A Guarda?

-Es difícil saberlo. Lo que único que sé es que todo cuanto se viene haciendo con esta "Festa do Cabaqueiro", publicación de la memoria anual, el monumento en la Praza , el Museo-Centro Etnográfico (con interesante sección del Cabaqueiro), supone ciertamente un intento de reconocimiento a ese duro trabajo (lasqueo).

-¿Hay algún episodio en común entre la juventud de hoy que busca la vida en otros países y aquellos hombres que eligieron las tejeras para poder sobrevivir?

-Lamentablemente sí. Ante la necesidad de vivir y sobrevivir, sea la época que sea, a veces las circunstancias obligan a la emigración, a salir de casa y a adaptarse.

-De su dilatada labor ¿de qué trabajo o publicación se siente más satisfecho y por qué?

-Es como con los hijos. Todos son estupendos, cada uno de ellos causaron satisfacción. Quizás el primero que publiqué: La Vía Romana "Per loca marítima" por el Bajo Miño y Costa Atlántica (1975). La verdad, es muy difícil escoger entre tantas publicaciones (arqueología, etnografía, etc. ). Por citar otro: Cruceiros, cruces e almiñas do Baixo Miño - I Concello do Rosal (1999).

-¿Qué es lo que más le ha sorprendido de la historia de la zona?

-Tanto O Rosal y A Guarda, como el Baixo Miño y Val Miñor, cuentan con insospechada e importantísima documentación para realizar su historia. Me ha sorprendido, con tantos años de estudio, su enorme riqueza patrimonial, máxime sobre arqueología (ya que esta es una zona privilegiada por su emplazamiento geográfico entre el Atlántico y el Miño). No puedo olvidarme de su patrimonio eclesiástico excepcional (monasterios, iglesias, capillas, cruceiros, entre otros).