Redondela volverá a estar gobernada otros cuatro años por el PP en minoría. La falta de acuerdo entre los grupos de la oposición para formar un gobierno de izquierdas permitió al popular Javier Bas volviese a tomar el bastón de mando en una sesión de investidura que transcurrió sin ningún tipo de incidencia pese al ambiente de tensión de los últimos días entre la Agrupación de Electores (AER) y el partido socialista.
La elección del alcalde se acordó realizar a mano alzada y todos los partidos se votaron a sí mismos, permitiendo así que el PP se mantenga al frente del gobierno local por segundo mandato consecutivo al ser la lista más votada con nueve concejales. La oposición la formará el PSOE con seis ediles, AER con cuatro, BNG con uno y Redondela Pode con otro.
Durante su discurso, Bas apeló al "entendimiento" entre todos los grupos "para dar respuesta a todos los retos" que tendrán que afrontar en los próximos cuatro años. "Aunque existan discrepancias tenemos que pensar que todos, y cada uno de nosotros, somos la representación de la voluntad de una gran parte de la sociedad de Redondela. Todos somos importantes y por tanto no se puede excluir a nadie, porque si así lo hiciéramos, estaríamos marginando la voluntad de una parte de los vecinos", afirmó el regidor local.
Los cuatro concejales de AER -Ricardo Figueroa, José Bernardo Crespo, Beatriz Laíño y Jorge Varela- y el edil del BNG, Xoán Carlos González, se saltaron el protocolo durante la toma de posesión de sus actas de concejales omitiendo la promesa de guardar "lealtad al Rey". Como anécdota, Jorge Varela "Chopi", se despidió con un "Aupa Redondela, eskerrik asko".